Otoño de 1914. Preparativos de guerra

Los lanceros de La India se preparan




Hospital militar




Carlos recibió la noticia de la declaración de guerra en Reichenau junto con el nombramiento de Coronel del Primer Regimiento de Húsares. Al día siguiente viajó hasta Hetzendorf, donde se encontró con una población exultante, que le recibió entre vivas y cantos patrióticos. A Carlos, un patriota alejado de la exaltación nacionalista romántica, le sorprendieron estas manifestaciones de júbilo, en las que participaban muchas mujeres, y le comentó a Zita:

--Soy militar, pero no entiendo que estas madres se alegran por esta guerra, que puede convertirlas en viudas, dejando a sus hijos enla miseria.




Del batallón de ciclistas




Comenzaron las movilizaciones. En Londres, París, San Petersburgo, Viena y Berlín se sucedieron los discursos, las soflamas, los desfiles y las paradas militares, entre arengas y cantos patrióticos. Cada gabinete de propaganda gubernamental encontró sus razones para la guerrA. Algunas imágenes de esos actos parecen ahora, al cabo de casi un siglo, de una ingenuidad tétrica. Pervivía una concepción decimonónica de la guerra, en la que los ejércitos conservaban aún, en sus modos y trajes, rasgos de la antigua épica caballeresca. Era el fruto de una educación nacionalista de décadas y del adoctrinamiento del servicio militar obligatorio (aunque apunta Howard que en GranBretaña no existía, y la opinión pública era tan nacionalista como en el continente).Los jóvenes se enrolaban con un entusiasmo que pronto se convertiría en angustia entre fango inacabable de las trincheras.

El Zar Nicolas con un uniforme alemán, mientras que el Kayser Guillermo II a su lado con un uniforme Ruso.


Se agudizaba el drama personal de Carlos, al que Francisco José envió para que le representara en las maniobras de movilización de los diversos Ejércitos. Carlos no compartía aquellas exaltaciones de nacionalismo exacerbado, no sólo por su condición de miembro de la Casa de Habsburgo que le llevaba a no vincularse exclusivamente con ningún pueblo, sino también por realismo político: sabía que Austria – que contaba con un elevado sector de la población pro alemana- tenía un escaso margen de movimientos en el tablero político europeo, y que para contrapesar el poder de Rusia sólo tenía una salida: aliarse con Alemania; pero esa alianza era muy peligrosa.Presentía que el país vecino acabaría sirviéndose de Austria –como sucedió- para sus propiosintereses. De hecho, a partir de aquel momento, Alemania fue la gran protagonista de la guerra desde el lado de los Imperios centrales.








Mientras tanto, en agosto de 1914 se consolidaron los dos grandes bloques de la contienda: por una parte, los Imperios Centrales (Alemania y Austria- Hungría); por la otra, la Entente de los Aliados (Francia, el Reino Unido, Rusia, Bélgica y Serbia). Comenzaba una guerra europea, en suelo europeo, pero –por primera vez en la historia- con repercusiones globales.