Hola JoseAntonio,
En realidad me atrae la polìtica internacional y entre las posibilidades està el socialismo que es muy interesante para mì. Aunque econòmicamente no sea lo mejor.
Es un poco largo lo que preguntas y debo hacer un prefacio para darte mi respuesta con una justificaciòn lògica. Esto es lo que opino.
Para entrar en la polìtica internacional uno debe madurar ideas y conceptos nuevos como la justicia social, la antropologìa, la sociologìa, la filosofìa, las ciencias polìticas, ciencias històricas y también historia, etc. Por eso me atrae; por la multiplicidad de disciplinas que la hacen interesante. Todo està relacionado con todo. Viendo la historia se entiende la polìtica, viendo la geografia se entiende la història, a asì sucesivamente. Todo està relacionado. Requiere un anàlisis holìstico màs que individual o especìfico. Todo comportamiento humano esta relacionado con todo.
La polìtica “menor” o politiquerìa se analiza desde un punto de vista personal hacia el mundo, hacia el todo.
“Si es bueno para mì es buena polìtica y si no es mala”.
"Si coincide con mi opiniòn es buena si no es mala". En realidad, en la polìtica la opiniòn personal, el individuo, el simple paìs no es algo importante; poco cuentan. Es para distraer al populacho.
A nivel internacional se estudia desde el mundo hacia uno. La polìtica es para el grupo de humanos; no para un individuo. Si yo creo que algo es bueno y la mayorìa dice que es malo, no significa que ellos son tontos sino que yo estaba equivocado. Si un pueblo como Venezuela (o Ecuador o Argentina) elige un socialismo, no “puede” estar equivocado porque
no existe eso en polìtica. Un individuo se puede equivocar pero no un pueblo. El mayor error es cuando no se permite a la mayorìa decir lo que desea.
En polìtica internacional las cosas cambian porque es la polìtica que interesa a varios pueblos.
Es difìcil de explicar pero yo lo veo asì. Uno no debe dar su opiniòn en polìtica sino escuchar la opiniòn de los demàs. Saber que una opiniòn existe y que consenso tiene entre la gente. Esa opinion tiene peso polìtico si es compartida por muchos, si no, es simple opiniòn personal sin importancia alguna. El polìtico no dice si una opiniòn es correcta o equivocada sino
“si existe o no” esa opinion; da acto que existe y se acabò.
Sabemos que la opiniòn de un pueblo es el promedio de las opiniones de sus integrantes quitàndole toda originalidad, excelencia, virtud, etc. La suma de las opiniones de la gente lima las individualidades y las genialidades dejando solamente la opinion mediocre y baja de lo que es comùn deseo entre todos. No se suman las genialidades sino las mediocridades impersonales. Ya decìa José Ingenieros:
La polìtica debe entender y manejar esas bajezas en modo que puedan convivir en modo constructivo y sin violencias. La religion ayuda mucho en este aspecto. No debemos ilusionarnos que la polìtica mueve grandes ideales, genialidades, personalidades. No. La polìtica organiza en modo inteligente las bajezas del ser humano para que no se maten entre ellos. Un polìtico debe entender còmo, cuàndo y qué quieren y mantenerlos en paz, dando un poco a uno un poco al otro para dejar contento al Santo y al pecador.
Existe en el ser humano un
“sentido comùn” que es la coincidencia de opiniones entre muchos, respecto a algo en especìfico. Esto hace que haya situaciones en donde el sentido comùn influye en las decisiones de un pueblo. Por ejemplo, a nadie se le ocurrirìa construir casas sin calefacciòn en Alaska. La opiniòn pùblica serìa contraria a una polìtica por el estilo.
Por eso, se dice que la geografìa hace la historia y la historia es el recontar los hechos polìticos de un pueblo. Es decir recuenta los hechos provocados por las relaciones humanas (la polis). Si no hay seres humanos no hay historia.
Esto me lleva a pensar que en el caso especìfico que me preguntas de Noruega, fueron las condiciones climàticas que agudizaron el sentido comùn; construyendo una polìtica mejor porque no podrìa ser diferente. Por lo que pude ver, un sueco o un noruego no son mejores individuos que un napolitano, pero las necesidades polìticas de un pueblo es diferente al otro y socialmente se comportan en modo diferente. La polìtica se construye viendo lo que sirve y resolviando problemas sociales. Se ve cuantos estàn conformes o no. Si no, se cambia polìtica. Obvio ademàs que un pueblo informado, estudiado y culto crearà mejores polìticas.
Es un error creer que un politico noruego es mejor que un mexicano o un argentino. Simplemente escuchan las opiniones de la mediocridad reinante y actuan en base a ello hasta que dejan de quejarse o, al menos, dejan de pensar en ahorcar polìticos. Es la mediocridad del pueblo lo que cuenta en polìtica y lo que hay que administrar. Aunque haya un montòn de premios Nobel entre ellos no cuentan, porque las genialidades se diluyen entre las mediocridades y, ademàs, la suma de genialidades coinciden en lo màs bajo y no en lo màs alto. Sino, otra serìa la historia….
A nivel internacional es igual. Lo vivimos ahora entre Asia y Occidente. Si veo que me va a tirar un petardo atòmico cambio actitud hasta que haya un punto de acuerdo en paz. Nada màs.
En definitiva, si un socialismo es mal administrador y no reparte equitativamente es porque al pueblo le està bien asì. La opiniòn media (o mediocre) del pueblo indica que la gente acepta esas cosas. Si los ven empuñar las armas cambian polìtica; si no “viva la pepa”.
Saludos.
PD: te dije que era largo.
Y me faltò el tema Patria que cuenta también en polìtica....