Cita Iniciado por intelectito Ver Mensaje
...perdona pero tengo el deber de rectificar tus argumentos sobre la siguiente base:

Jesús y la ley

Mt. 5:17 No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. 18Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Hola Intelectito. Tú no entiendes esas palabras del Evangelio, pues cuando Jesucristo dice que Él no vino a abolir la Ley, no se está refiriendo a las leyes del viejo testamento sino a la verdadera Ley de Dios que los judíos ya no conocían y que Jesucristo había venido enseñarles.

La Ley y los profetas no son todas las leyes del viejo testamento, pues Jesús abolió muchas de esas leyes. La Ley que Jesucristo no abolió es la verdadera Ley de Dios, que es la que Él mismo nos enseña en el Evangelio, porque Jesucristo mismo nos dice que ésta es la Ley y los profetas:

"todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque ésta es la ley y los profetas". (Mateo 7:12).

Por tanto, ésta es la Ley que Dios dio a Israel porque Jesucristo mismo dice que "ésta es la ley y los profetas". Ésta es la Ley que sigue vigente, que Jesucristo no vino a abolir ("No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas"). Y de esta Ley es de la que no ha pasado "ni una jota ni una tilde": de esta Ley que Jesucristo nos reveló en el Evangelio y que es la verdadera Ley que Dios había dado a Moisés.



Jesucristo también nos enseña la Ley en preceptos:

"........ si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones" (Mateo 19:16-22)

Ésta es la Ley y estos son los preceptos que Jesucristo no vino a abolir, los que Él mismo nos enseña en el Evangelio.