Yep, alguna vez la jugué... sólo puedo decir que hay algunas situaciones en las que las lineas de la realidad y la fantasía parecen converger. Igual, la mayoría de las veces la mente nos juega bromas pesadas y uno termina por autosugestionarse, aunque en otras ocasiones (muy raras y escasas, por cierto) cualquier idea lógica se esfuma y surge el temor a los desconocido y a los peligros (reales o imaginarios) que pudieran habitar en este...
Por lo demás, es puro choro