Hay veces que me pregunto cuál es el destino que le espera al ser humano.
Hoy leí una noticia sobre un caso extremo de bullying donde un niño americano de catorce años terminó con su vida al no soportar las burlas y el acoso del que era víctima en su colegio por el hecho de ser homosexual.
Lamentablemente este no es un hecho aislado, es casi una norma en este mundo moderno y deshumanizado, donde el poco popular, el gordo, el feo o el tímido debe de pagar día a día su derecho a ser diferentes al rebaño, con burlas y acoso extremo.
Y de ahí la pregunta que me hago a veces, que nos espera a los humanos, si somos incapaces de aceptar que no todos son iguales, que las diferencias existen y son enriquecedoras.
También me pregunto quién es más digno de lástima, el que es objeto de burlas por mantener sus diferencias en alto, o el pobre diablo que se ha amoldado a la mayoria y que acosa por el solo hecho de no sentirse discriminado por el rebaño…