Decálogo del amor inteligente-
Lic. Ada Fanelli
1.- Con respecto al amor existen dos tipos de personas: Los enamorados y los
que esperan enamorarse. Si usted pertenece al segundo tipo, ponga los pies
en la tierra, que si su corazón todavía duerme, su mente no tiene porque
hacerlo también.
2.- Mientras espera a esa persona que será su pareja, haga algo por la otra
mitad que es usted mismo. Tenemos miles de terminales nerviosas que nos
brindan valiosa información acerca de cómo nos sentimos en cada momento:
Aprendamos a prestarle atención
3.- Si estamos angustiados, no es recomendable usar el amor como una droga
o una terapia, es más probable que la angustia termine por disolver el amor,
con lo cual podríamos haber perdido una oportunidad de ser felices.
4.- La pareja debe colmar nuestros deseos, no satisfacer nuestras
necesidades. Esto quiere decir no conformarnos por “haber sido elegido-a”,
porque “es una buena chica-muchacho”, porque “a mi edad” etc.
5.- Tómese su tiempo y espere los tiempos del otro. Después de todo, todos
queremos que sea para toda la vida. Cuando alguien llegue, escuche,
pregunte, investigue, conozca: ¡no sea que esté usando a esa persona como
a una “percha” de la que colgar sus ilusiones!. Ninguno de los dos se lo
merece.
6.- Déjese sorprender. Anímese a conocer a personas que no están dentro de
lo que sus esquemas de “pareja” le indican. (Al fin y al cavo, seguramente ya
fracasó siguiendo esos antiguos modelos; entonces: ¿por qué no cambiar?).
7.- En el amor el secreto del éxito está en sentir lo mismo, pensar distinto y
hacer juntos.
8.- Si usted encontrara una moneda de oro, primero se pondría contento, pero
después le pediría a un joyero que haga la prueba para saber que,
verdaderamente, es de oro. En el amor es igual: no estaremos seguros hasta
no enfrentar la prueba del tiempo que, de diferentes maneras, nos exigirá
demostrar cuánto de benevolencia y cuánto de paciencia hay en nuestros
sentimientos.
9.- Todos “mentimos” consciente o inconscientemente, cuando queremos
seducir, mostrando sólo lo mejor de nosotros mismos. Debemos estar
dispuestos a desilusionarnos como una etapa para construir una relación
auténtica.
10.- Y si, a pesar de todo, esa persona no era, no se amargue: Una
frustración a tiempo es, también, una forma de adquirir sabiduría.