Un día uno de los tantos gallegos que existen regados por el mundo se encuentra un espejito en la calle, lo levanta y queda viendo fijamente el espejo:
-Joder! Que a este tío lo he visto en alguna parte- guarda el retrato en la bolsa del pantalón y se va a su casa, y en el transcurso ve el espejo y repite:
-Joder! Que a este tío lo he visto... pero coño quién es?
Llega a la casa y sigue viendo el espejito y su mujer gallega le pregunta:
-Que tanto veis?
-Nada nada mujer, joder que a este tío lo he visto-El gallego se va al baño y deja su pantalón en el piso de la recámara y la mujer aprovecha y va a ver lo que su esposo trae en el pantalón y dice:
-Lo sabía! Es el retrato de una mujer, y que cara de puta tiene!