Hoy termina la Semana Santa española con el Domingo de Resurrección.Ha sido una semana de "pasión" en la que se ha puesto de manifiesto la religiosidad profunda del pueblo español,tan "arraigada" que hasta, inconscientemente, la sienten los no creyentes.Porque, si se trata de un cordobés, de un sevillano, de un malagueño,y se examina en su interior,"sentirá" la "tirada" de sus ancestros hacia su "semana Santa" hasta el punto de venir de las mas lejanas tierras a rendir su pleitesia,su "estacion de penitencia" en la tierra en que nacieron.Hay casos paradigmáticos,como el del actor Antonio Banderas, casado con Melanie Grifiht, que todos los años se viste de nazareno en su Málaga natal y desfila con la cofradia a que pertenece.Y eso, sea creyente o no, lo siente en lo mas profundo de su alma.He visto, gracias a "internet", y al "directo", las procesiones de Córdoba y Sevilla en la distancia y las " he sentido" como si estuviera alli.He revivido las escenas entrañables de la niñez y de la primera juventud.Mi gratitud a quienes lo han hecho posible.