Amenazas, Amenazas, Amenazas, Amenazas.
Las creencias fundamentadas en amenazas no ofrecen nada bueno,
son infantiles, castradoras y despreciables.
Y, si existe un Dios, ese Dios no fundamentaría su presencia con amenazas.
Amenazas, Amenazas, Amenazas, Amenazas.
Las creencias fundamentadas en amenazas no ofrecen nada bueno,
son infantiles, castradoras y despreciables.
Y, si existe un Dios, ese Dios no fundamentaría su presencia con amenazas.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.