(Juan 8:28) Entonces Jesús dijo:
no hago nada por mi cuenta,
sino que digo lo que el Padre me enseñó.

Al decir: “Yo y el Padre somos uno”,
¿quiso decir Jesús que fueran iguales?
Algunos trinitarios dicen que sí. Pero en Juan 17:21,*22
Jesús oró con relación a sus seguidores:
“Que todos ellos sean uno”, y agregó:
“Para que ellos sean uno así como nosotros somos uno”.

Obviamente los discípulos de Jesús no llegaron a ser
todos parte de una Trinidad.

Pero sí llegan a participar de cierta unidad de propósito
con el Padre y con el Hijo, la misma unidad que une a Dios y a Cristo.