En una explicación de por qué había venido a la Tierra,
Jesús dijo al gobernador romano Poncio Pilato:

“Para esto he nacido, y para esto [o: con este propósito]
he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad.” (Juan 18:37)

Pero, ¿para dar a conocer qué verdades
en particular había sido enviado Jesús a la Tierra?

Primero,
verdades acerca de su Padre celestial.

El enseñó a sus seguidores a
pedir en oración que el nombre
de su Padre fuera “santificado,”
o tenido en santidad. (Mateo 6:9, Versión Valera)

Y oró: “He puesto tu nombre de manifiesto
a los hombres que me diste.” (Juan 17:6)

Además, dijo:
“Tengo que declarar las buenas nuevas del reino de Dios,
porque para esto fui enviado.”—Lucas 4:43.