
Iniciado por
KIMO
Las vírgenes y la novia son dos cosas distintas, estas vírgenes entraron al banquete de boda, pero no son la novia con la que Jesús se casa.
Jehová no instituyó la poligamia. Y aunque es cierto que la toleró por un tiempo, también la reguló estrictamente en la Ley mosaica para impedir los abusos (Éxodo 21:10, 11; Deuteronomio 21:15-17).
Cuando Jehová decidió prohibirla, se lo hizo saber a sus siervos mediante su Hijo. Al recordarles la norma original sobre el matrimonio, Jesús dejó claro que sus discípulos debían ser monógamos (Marcos 10:8).
Por lo tanto, es evidente que la Ley de Moisés cumplió su propósito para aquel tiempo, pero que “la ley del Cristo” la supera por mucho (Gálatas 6:2).