Sí Ciki, ha razonado y ha visto que en manos de Zampi alcanzará las estrellas. ¡No puede ser de otra manera! El destino ha unido nuestro gusto por la elegancia.
Tú acompañarás a las damas de honor en nuestra boda..
Menos mal que a alguien se le ocurrió poner esas sombrillitas, son lo único que salva a esos vestidos tan... originales.