Por supuesto que será luego de nuestro (para la mayoría) largo caminar por este mundo material.

Apocalipsis 21:1-7

"1Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.
2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.
3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.
4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.
5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida.
7 El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo."


Pero para entrar en el Paraíso de Dios se requieren algunas cosas: aceptar a Jesucristo como Salvador y Maestro, y para conocerlo recomiendo leerse el Evangelio según San Mateo de la Biblia, por lo menos. En mi blog pueden encontrar un resumen de las enseñanzas de Jesús, reglas de conducta para la vida cristiana y algunas de las luchas que enfrentamos los cristianos en esta vida.

Es necesario también reconocer la existencia del Dios Padre de la Humanidad y adorarlo, es el principal mandamiento que nos dejó Jesús, el siguiente es similar: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.

Espero nos encontremos allí dentro de algún tiempo.

Saludos.

Maximiliano Castagnino.