Muchas asociaciones de defensa de los derechos de los animales afirman que existen alternativas para llevar a cabo los experimentos sin dañar animales: simulaciones informáticas, cultivos de tejidos....También existen personas que voluntariamente aceptan participar en experimentos (a cambio de dinero, claro)

Lo que está claro es que todo esto resulta mucho más caro para las empresas y para nosotros.