La inteligencia artificial (IA) ofrece numerosas facilidades para realizar actividades cotidianas y especiales, lo que representa una ventaja competitiva para las empresas que utilizan estas herramientas para optimizar sus gestiones y procesos empresariales y de ventas. El marketing digital se ha convertido en un aliado fundamental para la creación y posicionamiento de marcas, productos y servicios, por lo que emplear una IA para obtener la información necesaria que contribuya a diseñar estrategias efectivas de marketing otorgará un mayor beneficio a las empresas, ya que con su apoyo se mejora la experiencia del cliente, se incrementa la eficiencia lo que permitirá ahorrar tiempo y recursos y se amplía el alcance pudiendo atraer y fidelizar a nuevos clientes.