Por milenios los que creen en Dios han practicado el tormento y la muerte en millones que rehusan creer en sus mitos, esto sucede cuando el mito de la predicación de la misericordia no funciona o cualquier manipulación, y en desespero al no poder convencer a los oponentes que resisten a creer en tales absurdidades amenazan a el prójimo o van mas allá de la amenaza.

Yo comprendo este sentimiento porque también sentí un enorme odio cuando fui un cristiano devotante, el anti-semitismo, el odio hacia los ateos, los ex-cristianos, y personas de otras creencias, aun mi propia familia se convirtieron en el enemigo, es lo que llamamos el amor de preferencia.

Hay algunos que pudimos salir del mito, una vez dejamos de creer en Dios, el odio a los enemigos de Dios se apaga, y nace el verdadero amor hacia el prójimo.

Solo los tibios de corazón no tienen ese sentimiento tan profundo de odio.

Los que se resisten a seguir creyendo en el mito de Dios a pesar que han sido refutados cientos de veces, son personas desequilibradamente mentales que les han lavado el cerebro y viven ciegos de la realidad, por lo que se recomienda nunca dar o poner información personal en un foro publico, porque nunca se sabe a que extremidades pueden ir.