El libro de Génesis dice: "Los hijos de Dios vieron que las hijas de los humanos eran hermosas, y se casaron con cualquiera de ellas que eligieron", Génesis 6: 2. Sus hijos eran híbridos dios-humanos a los que la Biblia se refiere como los "Nephilim".

Dios estaba descontento por este mestizaje y "lamentó haber hecho seres humanos en la tierra, y su corazón estaba profundamente turbado", Génesis 6: 6. Entonces envió un diluvio que aniquiló a muchos humanos y nefilim, pero no sin antes ordenarle a Noé que construyera un arca que salvó a unos pocos elegidos. La historia bíblica sugiere que la reproducción entre dioses y humanos fue un factor importante en la decisión de Dios de enviar el diluvio.