Cita Iniciado por tomas0402 Ver Mensaje
Los siguientes pasajes forman parte de la invención cristiana de un supuesto Plan Divino no contemplado en los escritos de los judíos.

Mateo copia lo que escribe Marcos, pero Lucas omite la supuesta reprimenda de Jesús a Pedro. ¿Por qué la omite?

Lucas suele omitir aquellos versículos que resultan difíciles de creer, o que pueden presentar problemas. Sabe que resultaría muy difícil olvidar algo que fue acompañado de una muy violenta bronca de Jesús a Pedro, y que fue presenciada por todos los apóstoles.

No obstante, conociendo el final del evangelio que ha escrito, intenta arreglar posibles incongruencias de la poca influencia de las palabras de Jesús entre sus seguidores, y escribe: «Pero él les mandó que a nadie dijesen esto, encargándoselo rigurosamente,». Esta frase, Marcos y Mateo la escriben en la declaración de Pedro de que Jesús es el Cristo.

En la segunda vez que vuelven sobre lo mismo, cambia el método de justificación del poco interés que tuvo para sus seguidores las supuestas palabras de Jesús.

“Y comenzó a enseñarles que le era necesario al Hijo del Hombre padecer mucho, y ser desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes y por los escribas, y ser muerto, y resucitar después de tres días. 32 Esto les decía claramente. Entonces Pedro le tomó aparte y comenzó a reconvenirle. 33 Pero él, volviéndose y mirando a los discípulos, reprendió a Pedro, diciendo: ¡Quítate de delante de mí, Satanás! porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres”.
(Marcos 8:31-33 Reina-Valera 1960)

“Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día. 22 Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca. 23 Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres”.
(Mateo 16:21-23 Reina-Valera 1960)

“Pero él les mandó que a nadie dijesen esto, encargándoselo rigurosamente, 22 y diciendo: Es necesario que el Hijo del Hombre padezca muchas cosas, y sea desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes y por los escribas, y que sea muerto, y resucite al tercer día”.
(Lucas 9:21-22 Reina-Valera 1960)


Vuelvo a recordar que al tercer día nadie estaba en el sepulcro de Jesús esperando su resurrección.
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