Lo curioso de todo esto es que fue su dios el que trajo el infierno a la Tierra, no el diablo.
Amorcito
Déjese de hablar sandeces
y vaya a hacer los quehaceres de su casa
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)
Veo que aprendiste a ningunear a las mujeres, conforme lo enseña el apóstol Pablo,
uno de los misóginos más grotescos de la historia.
¿Eso les enseñan en los salones del Reino? -- ¿a decirle a las mujeres que cierren el pico?
Debías avergonzarte.
No es en absoluto divertido.
Muy por el contrario, es grosero de tu parte.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.