Afortunadamente en el Siglo 21 tenemos suficiente información como para saber, entender y comprender de dónde vienen las historias de la Biblia.

Lo primero que hay que comprender es que la biblia fue escrita a partir del siglo 6 AC, a partir de relatos verbales y tradiciones,
enriquecidos (o inspirados) en lo aprendido durante el cautiverio en Babilonia.
Uno de los cambios profundos que tuvieron las creencias judías durante ese período fue el monoteísmo.