El amor “no se vanagloria, no se hincha”.
No busca el aplauso ni la admiración de otros
La persona que tiene amor no rebajará a su semejante
con el objeto de aparentar ser más importante,
sino que, más bien, exaltará la persona de Dios
y procurará con sinceridad animar y edificar a su semejante.
Edificar a sus semejantes es edificarlos en el conocimiento de los verdaderos mandamientos de Dios. que son los que Jesucristo nos enseña en el Evangelio, pues escrito esta:
" Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos"....
Vosotros los T.J no predicáis los mandamientos de Jesucristo, porque no los amáis. Vosotros amáis mas los mandamientos del viejo testamento judío, sin querer comprender que muchos de esos mandamientos solo eran preceptos de hombres, y Jesucristo los abolió.
Así que ya lo sabes, vuelve al Evangelio, y empieza a guardar y predicar los mandamientos que Jesucristo, te manda guardar y predicar.
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
EL AMOR No busca el aplauso
ni la admiración de otros
La persona que tiene amor no rebajará a su semejante
con el objeto de aparentar ser más importante como haces tu
Buenas KIMO,
Dios en el Evangelio contradice cualquier tipo de castigo, ni severo ni blando, dice que no se haga ojo por ojo de ninguna manera y que si te hacen daño no se lo hagas tu a él, por lo tanto contradice rotundamente la ley del ojo por ojo y como Dios no se contradice esa ley antigua del viejo testamento defectuoso no era de Dios.
La ley del “ojo por ojo”
no daba permiso para vengarse.
Más bien,
ayudaba a los jueces nombrados
a imponer castigos apropiados,
ni demasiado severos
ni demasiado blandos.