Versículos de la Carta 1 de Pedro Manipulada al Servicio de Gobernantes y Ricos

[Elisabet*]

La voluntad de Dios es la voluntad de Jesucristo, porque Jesucristo es Dios hecho hombre.

A Jesucristo le mataron y le asesinaron.

¡FALSO!!

Jesús dijo:
“Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra.”

Lo que te dice Roberto no es falso, pues Jesucristo hizo la voluntad del Padre, por eso no hizo sacrificios, porque Dios no quiere sacrificios ni le agradan los sacrificios. Jesucristo dejó que le mataran para enseñar los verdaderos mandamientos de Dios con su ejemplo y con sus enseñanzas del Evangelio, que mandan amor, misericordia y perdón.

Pero se ve que tú no quieres comprender que los mandamientos que Jesucristo enseña en el Evangelio y que Él mandó guardar para entrar en la vida, son los verdaderos mandamientos de Dios.

Pues muchos mandatos que están escritos en el viejo Testamento, no eran de Dios, sino preceptos de hombre, los cuales Jesucristo abolió porque no eran verdaderas ley de Dios, pues Jesucristo no vino a abolir la verdadera ley de Dios, sino a enserla como fue realmente dada por Dios.

[doonga]

...porque Dios no quiere sacrificios ni le agradan los sacrificios.

Eso se refiere a que no se hagan más asados de cordero como ofrenda a Dios.
Eres muy, pero muy mula.

[KIMO]

Lo que te dice Roberto no es falso, pues Jesucristo hizo la voluntad del Padre, por eso no hizo sacrificios, porque Dios no quiere sacrificios ni le agradan los sacrificios. Jesucristo dejó que le mataran para enseñar los verdaderos mandamientos de Dios con su ejemplo y con sus enseñanzas del Evangelio, que mandan amor, misericordia y perdón.

Pero se ve que tú no quieres comprender que los mandamientos que Jesucristo enseña en el Evangelio y que Él mandó guardar para entrar en la vida, son los verdaderos mandamientos de Dios.

Pues muchos mandatos que están escritos en el viejo Testamento, no eran de Dios, sino preceptos de hombre, los cuales Jesucristo abolió porque no eran verdaderas ley de Dios, pues Jesucristo no vino a abolir la verdadera ley de Dios, sino a enserla como fue realmente dada por Dios.

Entonces Jesus no hace su propia voluntad hace la voluntad de Jehova Dios

(Mateo 26:39) Luego se alejó un poco de ellos, cayó rostro a tierra y oró así:
“Padre mío, si es posible, aparta de mí esta copa.
Pero que no se haga lo que yo quiero, sino lo que tú quieres”.

Aunque a Jesús le complacía hacer la voluntad de Jehová, no siempre le fue fácil.
Veamos qué le sucedió poco antes de su detención, juicio y ejecución.
En el jardín de Getsemaní, tuvo el alma “hondamente contristada” y entró en “agonía”.
Sufría tal tensión que, mientras oraba, “su sudor se hizo como gotas de sangre que caían al suelo”
(Mateo 26:38; Lucas 22:44).

¿Por qué padeció tal angustia?
No por interés en sí mismo ni por indisposición a hacer la voluntad de Dios.
Como estaba listo para morir, había reaccionado con firmeza cuando Pedro le dijo:
“Sé bondadoso contigo mismo, Señor;
tú absolutamente no tendrás este destino” (Mateo 16:21-23).

Lo que inquietaba a Jesús era el efecto que tendría en Jehová
y su santo nombre su muerte como detestado criminal.

Sabía muy bien el dolor inmenso que sentiría su Padre
al ver el trato atroz que le dispensarían a él, su Hijo amado.