La policía y la calle, pérdida de control
En una ocasión recuerdo que me levante a las 11 de la mañana y que me bañe, desayuné me arreglé, me había puesto la playera blanca escotada, mi falda corta de mezclilla y mis sandalias de color negro, recuerdo que tome con desesperación las llaves de la casa y salí corriendo por enfrente de la casa y una voz me decía corre con los ojos cerrados apresúrate el avión te puede dejar, entonces en mi mente pude notar que el helicóptero había extendido una escalera al aire libre y que era por lo cual yo tenía que correr para alcanzarla, (no podía abrir los ojos, pues si los abría esa voz se molestaba conmigo) así que alguien me detuvo en mi travesía imaginaria, (la voz me dijo ya te vamos a matar y te vamos a tirar un balazo en la boca para que dejes de cantar y sobre todo hablar, entonces grite ¡sandia te amo...!)
Escuche que era un policía el que me había detenido, abrí los ojos, y el policía me detuvo, me puso unas esposas sobre mis pequeñas manos y las esposas no me contenían, pues fácilmente me podía quitar las esposas de mis manos, así que no intenté despojármelas esposas, y acto seguido me subieron en la parte trasera de la camioneta , y yo cerré los ojos por un momento, la camioneta se detuvo y abrí los ojos, pude ver que la camioneta había parado enfrente de la casa de mi hermano y entonces uno de los 3 policías que habían ahí me dijeron que cual era mi nombre, entonces les respondí diciendo mi nombre y entonces me preguntaron que si yo me drogaba, les dije que yo no y que mi hermano Robin si se drogaba. Entonces me quitaron las esposas y los policías se metieron a la casa para revisar si había drogas.
Yo lloraba porque me sentía triste y destrozada. Entonces mi hermano Robin se me acercó diciéndome para que les dijiste que yo me drogo, entonces yo gritándole le dije que me había dicho mi hermana Griselda (mi otra hermana que vivía en aquel tiempo también en la casa de mis padres en la Ciudad de México y la cual me había criado desde toda mi época de infancia).entonces yo seguí llorando y una vecina de mi hermano se me acercó y comenzó a abrazarme, yo le abrazaba y no podía parar de llorar.
Recuerdo que esa ves los policías que habían entrado a la casa en esta ocasión, habían desordenado la casa, sobre todo habían desordenado mi recamara. (Algo que, si yo no supe, era que Robin le había llamado a Griselda para que ella viniera por mí, por la buena o por la mala), después los policías se marcharon del lugar. También recuerdo que en la calle había tirado mi mini najaba suiza y las llaves de la casa, así como mi celular. (todos estos sucesos ficticios los veía con los ojos cerrados) no podía creer que me había atrapado la policía.
Federica, los doctores buscan deshacerse de mi.
Recuerdo la voz que escuchaba en mi cabeza y en mi mente no dejaba de dar vueltas en mi cabeza y aunque tenía los ojos cerrados, mi mente seguía trabajando, pensaba en salirme de la casa de mi cuñado, así que pensé y abrí los ojos y me dirigí a la puerta y que me salgo corriendo de la casa de mi cuñado corría y corría y me detuvo mi hermano Robin, y me trajo de regreso a la casa de mi cuñado entonces Federica me dijo que me subiera en el asiento de atrás de su camioneta y en el camino hacia el hospital iba gritando a cada rato eh futbolista...ole futbolista, ole futbolista...ole futbolista, y nadie me podía parar, cerré los ojos por un momento y una voz que me decía quítate la ropa, entonces me quite la blusa que llevaba puesta y se me veía el brasier y el short.
Me llevo a un sanatorio y tampoco quisieron atenderme, luego me llevaron a un consultorio y tampoco el doctor quiso atenderme, y luego me llevaron a otro hospital y en ese hospital enfrente del doctor le dije ole futbolista y entonces en eso vi a la enfermera que venía con una jeringa de tamaño grande y me puso la inyección en mi brazo izquierdo, me subieron en una silla de ruedas y yo sola como pude me subí con bastante dificultad para subirme a los asientos de atrás, puesto que me sentía muy debilitada como adormecida, y fue ahí como supe de que me habían sedado.
En el camino la voz me decía deja de respirar para que te mueras lentamente, entonces yo voluntariamente dejaba de respirar y apretaba muy fuerte los labios, para que no me entrara el aire fresco por la boca, y acto seguido inhalaba aire en mis pulmones para poder respirar, entonces esa voz me estaba martirizando de esa manera, (hasta llegaba a pensar de que era una señal que me mandaban a la mente de mi cabeza y de que de ese modo extorsionaban a las personas o victimas como yo). Acto seguido, regresamos a la casa de mi hermana Federica y yo sola me baje de la camioneta casi a gatas y me dirigí hacia la recamara de mi hermana Federica. Me comenzó a dar sueño y me dormí en la cama, y despertaba para ir al baño o para tomar suero oral que había en el refrigerador, y ya despertándome, pude ver que mi hermana Griselda, su novio Arnoldo y mi hermano Melchor ya estaban aquí en la localidad (y en efecto Robin le había hablado a Griselda para que viniera por mí).