Jesucristo dijo: >>Toda la ley, completa, sin faltarle ni una coma ni una tilde.<<
Pero claro, tú le buscas el acomodo conforme tus gustos, no conforme las palabras del evangelio.
Recuerda:
7 No penséis que he venido para abolir la ley o los profetas; no he venido para abolir, sino para cumplir.
18 Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Hola doomga estás completamente equivocado, y ya te lo he dicho varias veces que la Ley que Jesucristo no vino a abolir, son la ley y los mandamientos que El nos enseña en el Evangelio, pero de las leyes del viejo testamento judío Jesucristo si que abolió todos los preceptos de muerte, que Dios no había mandado. Una gran parte del Evangelio, está dedicada a los mandamientos de Jesucristo que dejaron abolidos muchos preceptos del viejo testamento judío.
Decir que Jesucristo no abolió ningun mandamientos de las leyes judías del viejo testamento, es no haber conocido nada de los mandamientos del Evangelio. Así que vete aprendiendo todo lo que enseña Jesucristo en el Evangelio, porque te hace mucha falta.
Vosotros los ateos a la hora de hablar de la verdadera ley de Dios, siempre decis los mismo, que todas las leyes del viejo testamento judío, son leyes de Dios, no es estraño esto?: que los ateos siempre quieren hacer ver que las leyes judías del viejo testamento son palabra de Dios?, yo pienso que no hay ateos, pero que si hay muchos enemigos de Jesucristo en el Evangelio.
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
No tienes nada que explicar ni decir.
No penséis que he venido para abolir la ley o los profetas; no he venido para abolir, sino para cumplir.
18Porque en verdad os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, no se perderá ni la letra más pequeña ni una tilde de la ley hasta que toda se cumpla.…Yo no soy ateo, y jamás lo fui.... Vosotros los ateos a la hora de hablar de la verdadera ley de Dios, siempre decis los mismo, ....
Lo que sí tengo (de lo cual tú careces), es la capacidad de entender lo que leo, y no inventar lo que está escrito.
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Perdona que te diga pero tú capacidad está muy mermada, seguramente por la edad, desbarias..
Hablas como un ateo y escribes como un ateo, y sea lo que sea que eres lo más ateo que se puede ser.
Tú no sabes ni sabrás nunca cuál es la verdadera ley de Dios, así que mejor habla de otra cosa... porque de ley de Dios... no entiendes nada de nada.
Tienes un pequeño problemilla de identidad.
Recuerda que yo estudié teología (asunto que no gusto de ventilar),
mientras que tú jamás lo hiciste (a pesar de que afirmar mentirosamente que eres teólogo).
Lo último está reforzado y certificado por el hecho de que descaradamente falsificas los escritos de la biblia,
según el nivel de glicemia que tienes en la sangre.
Recuerda:
"para mentir y comer pescado hay que poner mucho cuidado".
Jamás comprenderás la inmensidad de La Nada.
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
(Juan 12:49) Porque no he hablado por mi cuenta,
sino que es el Padre, que me envió,
quien me ha mandado lo que tengo que decir
y lo que tengo que hablar.
(Juan 5:30) Yo no puedo hacer ni una sola cosa por mi cuenta.
Juzgo de acuerdo con lo que oigo,
y mi juicio es justo, porque no busco hacer mi voluntad,
sino la voluntad del que me envió.
JUAN 8:28
28 Entonces Jesús dijo:
“Una vez que ustedes hayan alzado al Hijo del Hombre,
entonces sabrán que yo soy quien digo ser
y que no hago nada por mi cuenta,
sino que digo lo que el Padre me enseñó.
29 Y el que me envió está conmigo;
no me ha dejado solo,
porque yo siempre hago lo que a él le agrada”.
Fijate en lo que dice:
Y el que me envió está conmigo;
no me ha dejado solo,
porque yo siempre hago lo que a él le agrada
Dos personas distintas, no tres
el no se puede dejar el mismo
LO QUE YO ENSEÑO NO ES MIO
PERTENECE AL QUE ME ENVIO” (Juan 7:16.)