Iniciado por
tomas0402
Todo es cuestión de bolígrafo y papel.
Me dirijo a ti, cristiano. Me consta que has leído los evangelios en más de una ocasión. Te hago una proposición sin maldad alguna.
Vuelve a leer los evangelios en forma moderna. En plan de estadística. Sé sincero contigo mismo. Al menos, intenta hacer un esfuerzo cuyo resultado avale “tu creencia”.
Anota cuántas veces narran los evangelios que Jesús iba seguido por una multitud (en ocasiones dicen multitudes). Anota las veces que los evangelios narran que esa multitud (en ocasiones, multitudes), llevaban muchos enfermos que eran curados por Jesús.
Ten en cuenta que los sinópticos suelen repetir el mismo pasaje. No anotes lo que observes que se trata de la misma historia. Ante todo, debemos ser honestos.
Bien. Y ahora llega el momento de la verdad: Después de tres años de ser asediado por multitudes. Después de tres años sanando a los enfermos que llevaban esas multitudes, cabe preguntarse, sin que en esas preguntas anide la más mínima maldad:
Cuando murió Jesús ¿Todavía quedaba algún enfermo en Israel?
Cuando el Pueblo de Israel pidió la libertad de Barrabás y la muerte de Jesús ¿Dónde estaban las multitudes que asediaban a Jesús? ¿Dónde sus enfermos sanados? ¿Dónde sus parientes y familiares (de los enfermos)? ¿Dónde Lázaro y sus hermanas? ¿Dónde el centurión (a cuyo sirviente sanó)? ¿Y el hijo y la viuda de Naim? ¿Y Jairo y su hija? ¿Dónde estaba Zaqueo y su familia y amigos? ¿Dónde estaban los publicados con los que Jesús comía? ¿Y sus discípulos? ¿Dónde estaba José de Arimatea? ¿Y Nicodemo?
¿Dónde estaban los que le cantaran poco antes ¡Hosanna!?
Es cierto, cristiano. No te cuadran las cuentas.
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