Cita Iniciado por Elisabet* Ver Mensaje

El profeta Jeremías dice que el Nuevo Pacto es que Dios daría su ley a sus hijos en la mente de ellos y la escribiría en su corazón:

Jeremías 31:31-33 este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Yavé: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón

Esto nos enseña que Ley del Nuevo Pacto, que es la Ley que Jesucristo nos enseñó cuando predicó el Evangelio, es la Ley que Dios había dado realmente a Moisés y al pueblo de Israel, porque la profecía de Jeremías dice "Daré mi ley...." (la Ley que realmente habla dado Dios a Moisés). Y Jesucristo dio su vida por volvernos a enseñar esta verdadera Ley de Dios, por eso la sangre de Jesucristo es la sangre del Nuevo Pacto, que nos enseña la ley que realmente había dado Dios Moisés y al pueblo de Israel
Saludos Elisabet:
El Nuevo Pacto es Cristo y su sangre.
Antes el sacerdocio lo tenían los Levitas, el sacerdocio cambió y Jesús es el Único Sumo Sacerdote siendo de la Tribu de Judá, que nada tenía que ver con el sacerdocio prestablecido.
El apóstol Pablo lo explica de manera magistral.
Lee todo Hebreos 7.
Pero te pongo los puntos resaltantes, que es todo, pero mira:

Hebreos 7:11-19
11 Si, pues, la perfección fuera por el sacerdocio levítico --bajo el cual recibió el pueblo la Ley--, ¿qué necesidad habría aún de que se levantara otro sacerdote, según el orden de Melquisedec, y que no fuera llamado según el orden de Aarón?,12 pues cambiado el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley; 13 y aquel de quien se dice esto, es de otra tribu, de la cual nadie sirvió al altar. 14 Porque sabido es que nuestro Señor vino de la tribu de Judá, de la cual nada habló Moisés tocante al sacerdocio.
15 Y esto es aun más evidente si a semejanza de Melquisedec se levanta un sacerdote distinto, 16 no constituido conforme a la ley meramente humana, sino según el poder de una vida indestructible, 17 pues se da testimonio de él:
«Tú eres sacerdote para siempre,
según el orden de Melquisedec».
18 Queda, pues, abrogado el mandamiento anterior a causa de su debilidad e ineficacia 19 --pues la Ley nada perfeccionó-- y se introduce una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios.

La Ley de moisés ya no está activa en ninguna de sus cláusulas, normas, decretos, castigos ni maldiciones, Jesús deja clavada en la Cruz esa ley.

Col 2:14
Él anuló el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, y la quitó de en medio clavándola en la cruz.


Lo que sí es Eterna es la Ley Moral de Dios, la cual no se mueve ni se quita, y que Jesús vino a perfeccionar.