Eso será para muchos y es lo que quisieran los que no aman la misericordia y que amaron más las tinieblas que la luz.
Pero resulta que el Evangelio nos enseña que lo que Dios quiere es la misericordia. Y Dios ha querido que esta enseñanza permanezca y luzca en las tinieblas para que alumbre a todos sus hijos. El Evangelio hablando del Verbo o la Palabra, así dice:
Juan 1:4
En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
1:5 La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
Jesucristo mandó a sus apóstoles y discípulos que fueran por todos los pueblos del mundo predicando el Evangelio y sus misericordiosos mandamientos, y esto se debe confesar y no se debe negar, pues así dijo Jesucristo:
"Os digo que todo aquel que me confesare delante de los hombres, también el Hijo del Hombre le confesará delante de los ángeles de Dios; mas el que me negare delante de los hombres, será negado delante de los ángeles de Dios". (Lucas 12:8-9)
Es a Jesucristo y el Evangelio, con sus misericordiosos mandamientos, lo que deben seguir todos los hombres y mujeres de buena voluntad de todas las naciones que quieran entrar en la vida...
Las cartas atribuidas a Pablo torcidas y mal interpretada por lo indoctos que no aman los misericordiosos mandamientos del Evangelio de Jesucristo, han sido un terrible tropiezo y han confundido a muchos que querían amar a Jesucristo...
Las iglesias cristianas deben volver al Evangelio de Jesucristo...
Los apóstoles y primeros discípulos eran todos del siglo primero, y ellos predicaron el Evangelio, y por ello dieron su vida... Tus cuentos no tienen fundamento...Iniciado por Roberto0
Jesucristo mandó a sus apóstoles y discípulos que fueran por todos los pueblos del mundo predicando el Evangelio y sus misericordiosos mandamientos, y esto se debe confesar y no se debe negar, pues así dijo Jesucristo:
"Os digo que todo aquel que me confesare delante de los hombres, también el Hijo del Hombre le confesará delante de los ángeles de Dios; mas el que me negare delante de los hombres, será negado delante de los ángeles de Dios". (Lucas 12:8-9)
Es a Jesucristo y el Evangelio, con sus misericordiosos mandamientos, lo que deben seguir todos los hombres y mujeres de buena voluntad de todas las naciones que quieran entrar en la vida...
Las cartas atribuidas a Pablo torcidas y mal interpretada por lo indoctos que no aman los misericordiosos mandamientos del Evangelio de Jesucristo, han sido un terrible tropiezo y han confundido a muchos que querían amar a Jesucristo...
Las iglesias cristianas deben volver al Evangelio de Jesucristo...
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... Prefieren a ""Pablo"" que justifica la esclavitud y la Ley de la espada...
No existieron tampoco apóstoles, eran meras tradiciones judías.
Hay muchas tradiciones acerca de las supuestas muertes de los apóstoles, pero no hay registros históricos de sus muertes, suponiendo que incluso fueran personas reales e históricas.
Tradicionalmente, se dice que San Pedro fue crucificado en Roma, y ??la tradición finalmente dijo que fue crucificado al revés como un favor especial para Pedro, quien había pedido esto en lugar de ser crucificado de la misma manera que Jesús. El hermano de Pedro, Andrés, supuestamente hizo casi la misma solicitud para sus verdugos y fue crucificado en una cruz en forma de X.
En una tradición, los "idólatras impacientes" golpearon a Bartolomé y luego lo crucificaron; otra historia dice que fue desollado con un látigo y otro dice que fue desollado vivo y luego decapitado.
Tomás fue presuntamente asesinado en St. Thomas Mount cerca de Chennai en 72 dC y su cuerpo fue enterrado en Mylapore. Sin embargo, no hay evidencia de su presencia en la India.
Juan, hijo de Zebedeo, fue presuntamente hervido en aceite, pero sobrevivió. Luego fue llevado a Patmos y exiliado allí, escribiendo el Libro de la Revelación y muriendo de vejez en Patmos. Sin embargo, los estudiosos modernos dicen que la leyenda se desarrolló para sobrevivir el tiempo suficiente para escribir Revelación, aunque los estudiosos dicen que el apóstol Juan claramente no fue el autor de la Revelación.
Estos, y otros como ellos, fueron mitos que se desarrollaron para dar a los primeros cristianos razones para admirar a los apóstoles y como "evidencia" de su gran fe, obtenida a través del conocimiento personal de Jesús. Realmente no se sabe cómo murieron los apóstoles, ni cuándo.