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Tema: Perdónanos nuestras deudas

  1. #1
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    Smile Perdónanos nuestras deudas

    Perdónanos nuestras deudas (Mat. 6:12).

    ¿Por qué dijo aquí “deudas” Jesús si en una ocasión posterior dijo “pecados”? (Mat. 6:12; Luc. 11:4). Hace sesenta años, La Atalaya explicó la razón: “Un pecado de transgresión contra la ley de Dios nos pone en deuda con él. [...] En pago de nuestro pecado Dios podía exigir y tomar nuestra vida; [...] podía retirar su paz de nosotros, rompiendo todas las relaciones pacíficas que tiene con nosotros. [...] Le debemos nuestro amor, expresado en obediencia; y cuando pecamos dejamos de pagarle nuestra deuda de amor, porque el pecado es falta de amor hacia Dios” (1 Juan 5:3). El hecho de que necesitemos pedir perdón todos los días nos recuerda que, legalmente, la única manera en la que Dios puede perdonar nuestras deudas es mediante el sacrificio de rescate de Jesús. Aunque ese rescate se pagó hace casi dos mil años, deberíamos valorarlo tanto como si se hubiera pagado hoy. En realidad, el pago que se hizo por nuestra vida era tan elevado que ningún ser humano imperfecto hubiera podido cubrirlo (Sal. 49:7-

  2. #2
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    Lo que debo de la tarjeta también me será perdonado?

  3. #3
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    Cita Iniciado por Violetta Ver Mensaje
    Lo que debo de la tarjeta también me será perdonado?
    Me perdonarás la deuda que tengo contigo de haber andado por aquí hace varios días y no haberte saludado??
    Mi pena es sencilla y nada misteriosa y, como tu alegría, por cualquier cosa estalla.

  4. #4
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    Cita Iniciado por Violetta Ver Mensaje
    Lo que debo de la tarjeta también me será perdonado?
    Mat.22:17 Dinos, por lo tanto: ¿Qué te parece? ¿Es lícito pagar la capitación a César, o no?”. 18 Pero Jesús, conociendo la iniquidad de ellos, dijo: “¿Por qué me ponen a prueba, hipócritas? 19 Muéstrenme la moneda de la capitación”. Ellos le trajeron un denario. 20 Y él les dijo: “¿De quién es esta imagen e inscripción?”. 21 Dijeron: “De César”. En seguida les dijo: “Por lo tanto, paguen a César las cosas de César, pero a Dios las cosas de Dios”.

  5. #5
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    30-noviembre-2016
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    Cita Iniciado por Violetta Ver Mensaje
    Lo que debo de la tarjeta también me será perdonado?
    Claro, claro... sigue pensando en esa ilusión. :001_tt2:

  6. #6
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    Cita Iniciado por Nietzscheano Ver Mensaje
    Me perdonarás la deuda que tengo contigo de haber andado por aquí hace varios días y no haberte saludado??
    estoy acostumbrada a tus ataques menstruales.



    Cita Iniciado por Eli_yahu Ver Mensaje
    Mat.22:17 Dinos, por lo tanto: ¿Qué te parece? ¿Es lícito pagar la capitación a César, o no?”. 18 Pero Jesús, conociendo la iniquidad de ellos, dijo: “¿Por qué me ponen a prueba, hipócritas? 19 Muéstrenme la moneda de la capitación”. Ellos le trajeron un denario. 20 Y él les dijo: “¿De quién es esta imagen e inscripción?”. 21 Dijeron: “De César”. En seguida les dijo: “Por lo tanto, paguen a César las cosas de César, pero a Dios las cosas de Dios”.
    Yo mejor no opino, luego me echan la culpa como a mi prima cuando salió embarazada y ella no fue.



    Cita Iniciado por Shetland Ver Mensaje
    Claro, claro... sigue pensando en esa ilusión. :001_tt2:
    tons no? Bu!

  7. #7
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    Para recibir el perdón de Dios, debemos esforzarnos por no cometer pecados graves:

    1Juan 3:4 Todo el que practica pecado también está practicando desafuero, de modo que el pecado es desafuero. ... 6 Todo el que permanece en unión con él no practica el pecado; nadie que practica el pecado lo ha visto ni ha llegado a conocerlo

    ... lo cual nos lleva a la siguiente petición de la oración modelo:
    “NO NOS METAS EN TENTACIÓN”.

    La forma en la que esta petición está formulada, parece que diga que es Dios quien nos mete en la tentación, pero el asunto es diferente de eso. Jehová es santo; él no tienta a nadie para ver si hace cosas malas. “El Tentador” es el Diablo; él crea situaciones que nos ponen a prueba. Si se analiza un poco la tentación del Diablo a Jesús, se entenderá mejor este asunto:

    Mat.4:3 También, el Tentador vino y le dijo: “Si eres hijo de Dios, di a estas piedras que se conviertan en panes”.

    La Biblia también lo explica aquí:

    Sant.1:13 Al estar bajo prueba, que nadie diga: “Dios me somete a prueba”. Porque con cosas malas Dios no puede ser sometido a prueba, ni somete a prueba él mismo a nadie. 14 Más bien, cada uno es probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo. 15 Entonces el deseo, cuando se ha hecho fecundo, da a luz el pecado; a su vez, el pecado, cuando se ha realizado, produce la muerte.

    En realidad Dios permite que caigamos en situaciones en que nuestra fidelidad se pone en juego, pero la verdad es que también proporciona las vías y la educación necesaria para que salgamos vencedores durante esos momentos. No obstante a eso, la Biblia dice que si pecamos y nos arrepentimos de los errores, Dios muestra misericordia y puede perdonarnos. Es por eso que antes Jesús había enseñado a pedir para que se nos perdonaran nuestras deudas. Igual debemos perdonar a los que nos ofenden para que Dios muestre también su perdón.

  8. #8
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    17-septiembre-2016
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    Predeterminado

    Siendo que Jesús era un ser perfecto y según la Escritura no llegó a cometer pecado, el Tentador debió venir a ofrecerle ciertas "ganancias" o satisfaciones a sus necesidades, si cometía ciertas acciones incorrectas. Desde nuestro punto de vista pudiera parecer que aquellas acciones que el Diablo requería de Jesús fueran algo inofensivas, pero el caso es que la naturaleza perfecta de Jesús requería que él no violara EL MÁS MÍNIMO DETALLE de la Ley de Moisés, que estaba escrita para literalmente hacer a un hombre completo delante de Dios y salvado por cumplimiento de ley, por tanto no digno de morir. Si Jesús desobedecía uno solo de los detalles de la Ley de Moisés, hubiera sido responsable consciente de desacato a la Ley de Dios y hubiera sido culpable de pecado y su muerte habría sido merecida. Pero Jesús no solo se mantuvo fiel en aquella ocasión, sino hasta el final.

    El Tentador tuvo que presentarse a hacer sus ofertas porque de la mente de Jesús no salió deseo pecaminoso alguno. Jesús fue exigente consigo mismo así como demostró con sus palabras para otros: por ejemplo, decía que no bastaba con que un hombre se acostara con una mujer para haber cometido adulterio, decía que incluso haber deseado a aquella mujer mentalmente ya constituía adulterio. Si eso dijo Jesús a otros, es lógico concluir que Jesús se cohibió de toda clase de deseo pecaminoso. Nada pudo habérsele ocurrido que le pudiera haber llevado a cometer un pecado. En su estado perfecto, cualquier pensamiento de esta clase le hubiera llevado fácilmente a pecar, pues un ser perfecto no considera seriamente que pueda haber una equivocación en una idea que se le ocurre; o sea que cuando actúa, actúa a plena conciencia. El proceder fiel de Jesús, permitió que su sangre ofrecida fuera derramada como un sacrificio sin mancha a favor de los pecados del resto de la humanidad. Fue desde antes de que viniera a la tierra, conveniado desde el cielo, como solución al hecho de que nacemos predispuestos a pecar por un error que en realidad cometieron nuestros padres originales.

    Diferente de Jesús, que no pensó alguna idea incorrecta, el resto de los humanos tendemos a cosas incorrectas desde muy jóvenes. Lo que el Tentador hace es presentarnos imágenes visuales, mentales, etc, que aviven en nuestros cuerpos deseos incorrectos. En las mentes creemos que esos deseos son necesidades que debemos satisfacer (como forma de supervivencia), y puede que terminemos realizando el acto pecaminoso.

    De este modo de ver lo que es el pecado, podemos entender cómo podemos tratar de escapar de él.

  9. #9
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    17-septiembre-2016
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    Algunos consejos son:

    No entretengas un mal pensamiento en la mente, deséchalo como algo que no debes ni siquiera considerar, como cuando espantas una mosca de la comida.

    Aprende bien lo que la Escritura condena, y no trates de justificar una creencia que lo contradiga solo porque está en juego tu propia satisfacción personal.

    No confundas lo que es un deseo que quieres satisfacer con una necesidad real. Las necesidades reales son humanas y siempre hay una forma correcta de satisfacerlas. Los deseos que violan la ley de Dios son caminos espinosos que Dios quiere evitarnos por nuestro propio bien.

    Apártate de cierta gente que te quiere hacer creer que satisfacer ciertos deseos no es incorrecto delante de Dios. Es muy probable que te quieran usar para satisfacer sus propios deseos y no les importe un comino lo que te suceda a tí o tu moral.

  10. #10
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    03-julio-2014
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    Predeterminado

    Muchachos, no le busquen mucho sentido espiritual a los pasajes de la Biblia ni a las oraciones...
    Me han hecho recordar un post que puse en otro hilo hilo y que decía lo siguiente:

    Hablando de Padrenuestro y de "toqueteos" a la Biblia quisiera recordarles que el Padrenuestro fue cambiado por la Iglesia Católica para adaptarlo convenientemente a las circunstancias.
    En efecto, la versión que se usó hasta los '80 decía "perdónanos nuestras deudas..." pero luego se modificó a "perdónanos nuestras ofensas..."
    Parece ser que la Iglesia nos quiso dejar bien en claro que las las ofensas se pueden perdonar pero las deudas no, eso ya es otra cosa.
    Eso ocurrió durante el auge de la Teología de la Liberación en los países tercermundistas que clamaban por una reducción de sus deudas con el FMI y otros organismos de crédito internacionales.
    La Iglesia definió claramente cual es su postura al respecto.


    La religión es un fraude. No se dejen embaucar.
    "Es más fácil engañar a la gente que hacerle ver que ha sido engañada" Mark Twain

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