Las tribus de Israel parece que eran trece, siendo dos de ellas unificadas como descendientes de Jose, el hijo de Jacob que según la tradición oral fue ministro en Egipto. La tribu de Levy se encargo de labores sacerdotales y no entro en el reparto de tierras efectuado por el líder de todas las tribus confederadas, Josue.
Hay que considerar al numero doce como un numero kabalistico ancestral, de tradición Sumeria, ya eran las doce constelaciones celestiales y del Zodiaco.
Desde el principio la tribu mas importante, la líder de las demás, fue la tribu de Efraím. Y en su territorio estaba el asentamiento sagrado de Silo.
Según la primera recopilación de las escrituras sagradas hebreas, en el muy posterior segundo exilio en Babilonia, en Silo estaba guardada un arca o arcón, decorado con querubines, donde se encontraban las tablas de la Ley entregada por Yahveh a Moisés para su pueblo.
Algo bastante improbable es el adorno de los querubines, ya que estos eran los toros alados protectores de las puertas de las ciudades asirias, posteriores y desconocidas por mucho tiempo por los israelitas. Además, ellos no creían en ángeles hasta el segundo exilio en Babilonia.
Se cree que en el santuario de Silo había una representación de un toro, símbolo de la tribu de Efraím. Lo que concuerda con el relato bíblico del becerro de oro adorado por los israelitas, mandado a fabricar por Aaron. Parece un relato moralizante posterior a la destrucción de Silo por los filisteos, para justificar el cambio del santuario principal al Templo de Jerusalén, donde no había imágenes de idolatría, sino La Ley (esto es algo posterior y tiene su historia)
Según datan muchos historiadores las tribus empezaron a ocupar las tierras de Canaan del sur alrededor del año 1220 A.C. y los filisteos en el 1185 A.C.
Mientras los filisteos, aparentemente en la edad de hierro, se asentaban en cinco ciudades de la costa de Gaza, los israelitas, en la edad de bronce, ocupaban las tierras de los cananeos del sur. Sometieron a varias tribus del mismo grupo lingüístico hebreo que rodeaban sus territorios, y chocaron en el lago Tiberiades con los otros semitas llegados a la zona, los arameos de Damasco, conocidos por los griegos como Sirios.
Los fenicios, cananeos de las ciudades de las costas norteñas de Canaan, hoy Líbano, como comerciantes al fin, se llevaban bien con los israelitas por ser sus tierras claves para las rutas hacia Egipto
La ausencia de evidencia no es evidencia de su ausencia
Hay dos maneras de vivir su vida: una como si nada es un milagro, la otra es como si todo es un milagro. ( Albert Einstein )
El hombre encuentra a Dios detrás de cada puerta que la ciencia logra abrir. (Albert Einstein )
El azar no existe; Dios no juega a los dados. (Albert Einstein )
Si tu intención es describir la verdad, hazlo con sencillez y la elegancia déjasela al sastre. (Albert Einstein )