Abro este hilo para exponer porqué es errónea la afirmación categórica de Ferna de que el humanismo es ateo, en un afán de respetar su intención de que su hilo sea únicamente para preguntas y no para debates (y bueno, admito que también para evitar que me acuse de tener “agendas ocultas” y me cierre la puerta o me invite a abandonar el hilo y despedirnos educadamente o me bloquee).

El que las preguntas que se la han planteado hayan quedado respondidas de forma satisfactoria y clara ya es otro asunto en el que no entraré, puesto que ya manifesté expresamente que a mi parecer, no lo han sido. Y el que Ferna haya abierto un hilo de preguntas y cuando se le repregunte para esclarecer la respuesta ininteligible e insatisfactoria que ha dado le moleste y lo atribuya a la falta de entendimiento del interlocutor y no a su deficiente forma de argumentar o cuando los participantes pretendemos comentar la respuesta y diga que no quiere entrar en debates y nos invite a no leerle me parece absurdo e incongruente (justo el humanismo promueve el raciocinio y el debate es una buena forma de poner en marcha y enriquecer el razonamiento) pero bueno, allá él.

El humanismo, en su acepción moderna y en términos simplistas, es una ideología/filosofía de vida que exalta el valor de los seres humanos, individual y colectivamente y promueve la razón, la ética, y la justicia como base de la moralidad y la toma de decisiones, rechazando la doctrina establecida o la fe.

A través de la historia, el término humanismo ha variado, según los diferentes movimientos intelectuales que se han identificado con él y en la actualidad se le identifica normalmente con el secularismo y ateísmo.
Sin embargo, contrariamente a lo que opina Eduardo, quien afirma categóricamente que el humanismo necesariamente es ateo, basta con echar un vistazo a la historia, para constatar que dicha afirmación es ERRÓNEA, puesto que existieron teólogos humanistas y humanistas creyentes (entre otros, Tomás de Aquino, Agustín de Hipona, Erasmo de Roterdam, Tomás Moro, Ignacio de Loyola, Fray Juan de Zumárraga, Francisco de Vitoria, quien además fue un gran jurista) y en la época contemporánea, existe el humanismo cristiano, que es una filosofía de vida que postula la plena realización del hombre en lo individual, político y social, dentro de un marco de principios rectores de conducta cristianos. Jacques Maritain, filósofo converso al catolicismo, es el principal exponente del humanismo cristiano.

De hecho, el libro de Maritain “Humanismo Integral” ha pasado a formar parte plena de la Doctrina Social de la Iglesia desde que Pablo VI en su encíclica Populorum Progressio lo citó textualmente diciendo que ese es el verdadero y pleno humanismo que se ha de promover, lo cual también fue ratificado documentalmente y en la práctica por Juan Pablo II durante su pontificado.

El humanismo integral postula que el humanismo que excluye a Dios es un humanismo inhumano ¿acaso no es la historia contemporánea un claro ejemplo de esta deshumanización?

Por ello, es perfectamente compatible ser humanista y ser religioso o creyente. Además de que el número de “afiliados” de la Iglesia Católica de cuya Doctrina Social forma parte fundamental el HUMANISMO INTEGRAL, no tiene ni punto de comparación en número con los afiliados de la IEHU.

Saludos humanistas!