Si se trata de confesar, no soy lo que esperan, suelo aparentar todo está bajo control mientras tengo cortas escenas de llanto en el sanitario, luego regreso con paso firme y actitud de nada a pasado, en las crisis incluso las familiares nada suelo demostrar, aprendí con las marcas del pasado en mis costillas ocuparme de lo inmediato evitando el precipicio, escondo el aroma de la culpa con un buen perfume marinado con tres o cuatro duchas todos los días.
Ya no hago exámenes, no me permito la aprobación, decline la redención en ese bar donde solía encontrar un poco de paz, deje de buscarle en sus letras, abandone las principales etiquetas al lado de las sentencias tan comunes como aquellos que me rodean.
Durara lo que debe durar, acabara cuando deba de hacerlo, la razón está sobrevaluada, lo único no sacrificable son estos momentos invaluables de demencia donde me permito escapar una y otra vez, guárdate pues los reproches, las puertas siempre están abiertas en ambos lados, todo principio tiene un fin, cada cosa que empieza al final debe concluir, se vive antes de y después, el vacio paulatinamente se vence.
No temo morir, me da terror vivir a la sombra de los sueños de otros….
«The brain is the seat of madness and delirium.»
¿Y el soldadito del pomo?
Ese que tiene miedo de salir, por supuesto de un trozo de vidrio esterilizado,
debidamente acondicionado, un lugar seguro donde no puede arriesgar nada,
se asoma por encima del borde tratando de experimentar el aire libre
luego regresa con la certeza de que esta mejor dentro que fuera...
Mientras tanto la vida con sus accidentes y tropiezos sigue trascurriendo,
lo que se pierde rara vez se recupera, el tiempo mal invertido jamás.
«The brain is the seat of madness and delirium.»
“El hombre es la víctima de un medio que se niega a comprender su alma”.
Charles Bukowski.
El ensayo se negó a ser encontrado aguarda entonces al Dr. Sárcastico.
«The brain is the seat of madness and delirium.»
"Un lugar sensato en una tierra sensata"
"Me acostumbro a efectuar una ronda por los corredores entre las 3:00 y las 4:00 de la madrugada.
Visito a menudo la habitación secreta, procurando añadir regularmente entradas a mi diario.
La rutina es importante, creo. Una buena rutina aparta la mente de pensamientos escabrosos.
Aveces me parece oír carcajadas histéricas procedentes de una celda que sé que está vacía.
[...] Las carcajadas cesan.
[...] La casa es un organismo hambriento de locura.
Es un laberinto que sueña.
Y estoy perdido."
"Y el mundo explota. No hay nada a lo que aferrarse. Ningún ancla. Presa del pánico huyo. Corro a ciegas por esta casa de locos. Y ni si quiera puedo rezar. Pues no tengo Dios."
Batman: Arkham Asylum (Frases Célebres)
«The brain is the seat of madness and delirium.»
No era la Muerte, pues yo estaba de pie…
Emily Dickinson
No era la Muerte, pues yo estaba de pie
Y todos los muertos están acostados,
No era de noche, pues todas las campanas
Agitaban sus badajos a mediodía.
No había helada, pues en mi piel
Sentí sirocos reptar,
Ni había fuego, pues mis pies de mármol
Podían helar un santuario.
Y, sin embargo, se parecían a todas
Las figuras que yo había visto
Ordenadas para un entierro
Que rememoraba como el mío.
Como si mi vida fuera recortada
Y calzada en un marco
Y no pudiera respirar sin una llave
Y era como si fuera medianoche
Cuando todo lo que late se detiene
Y el espacio mira a su alrededor
La espeluznante helada, primer otoño que llora,
Repele la apaleada tierra.
Pero todo como el caos,
Interminable, insolente,
Sin esperanza, sin mástil
Ni siquiera un informe de la tierra
Para justificar la desesperación.
«The brain is the seat of madness and delirium.»
… abrí mi cuarto, mi pequeña apariencia de hogar, donde me esperaban el sillón y la estufa, el tintero y la caja de pinturas, Novalis y Dostoyevski, igual que a los otros, a los hombres verdaderos, cuando vuelven a sus casas, los esperan la madre o la mujer, los hijos, las criadas, los perros y los gatos."
(El lobo estepario. Herman Hesse)
«The brain is the seat of madness and delirium.»
Creo en la pura alegría surrealista del hombre que, consciente del fracaso de todos los demás, no se da por vencido, parte de donde quiere y, a lo largo de cualquier camino que no sea razonable, llega a donde puede.
André Bretón
«The brain is the seat of madness and delirium.»
Incierto…
Como ese poema que no se concluyó, la vigilia previa a ese dolor profundo, en pausa obligada tan cerca y tan lejos, apretando entre los dedos el peaje hacia ninguna parte. Similar al golpe seco de la despedida esa madrugada, abandonado, confuso y perdido.
Acomodando los segundos, formándoles uno tras otro de manera obsesiva, como mudos testigos de lo que ahí sucedía y ese frío que cala los huesos, acompañado de incesante tintinear de dientes, aferrándose a la balsa que en un vaivén juega con sus recuerdos.
Navega por el hades sin brújula, sin recordar si tuvo una. Levanto lo quedaba de su rostro pretendiendo sentir, respirar, percibir. Nada observo estaba tal y como nunca fue, el familiar dolor en el costado le distrajo unos segundos.
El recuerdo de casi dos décadas abofeteo la tranquilidad del momento, sin aliento se obligó a prepararse para esta, su ultima batalla. Desprovista de ira, sin escudo ni espada; invoco a los Dioses sin respuesta. Entonces la incertidumbre empezó a llenar sus alforjas.
Sin mapa dejo que la barca se deslizara, ¿Cuál es la prisa? 19 años en este régimen peleando contra enemigos inexistentes debieron dejarle alguna experiencia. Palpo el par de ases seguían ahí, la lluvia arrecio, empapando todo a su paso, evito los juicios ¿Qué esta bien y que esta mal?, respiro profundamente aun sin saber que haría después. Cerro los ojos sopesando el recuento de las perdidas, los costos de la última travesía donde no regreso sola.
«The brain is the seat of madness and delirium.»
Inconcluso
Ya inventarié todo el equipaje, acomode cuidadosamente la memoria con sus recuerdos, conté todos y cada uno de los demonios con los que cohabite. Me ayudo a su manera mi hermano al menos su espíritu, se niega a quedarse en su nicho por ello se aparece cuando quiere perdiéndose por temporadas. Me equivoque en las otras mudanzas con la firme creencia de dejar todo atrás, esta vez no llegare tarde al andén, calcule los tiempos para verme favorecida.
Cuento con el tiempo para entregar a las bestias a su nueva morada, mientras escribo esto observo las huellas de sus garras en mis manos, ya lloverá. Prepare el testamento y las ultimas peticiones, las naves arden en los puertos adecuados, no encontré un par de meses supongo se los llevo la abuela, el hijo que nunca tuve pero perdí, intentare entonces hacer de los años menos meses y más perdón.
No entra una melodía más, eso me desanima, las pausas siempre son incomodas, el legado de los libros, ensayos así como los cuentos que escribí tienen nombre y apellido, aunque temo que ella no los entienda y terminen en el basurero virtual o en una venta de garaje.
El final lo dejo abierto las despedidas siguen incompletas y los procesos INCONCLUSOS según la autoridad correspondiente, me deslizo entonces a un sueño profundo y reparador, mientras las maquinas reportan signos vitales.
«The brain is the seat of madness and delirium.»