Más que el amor, habría que pensar en porque se termina el amor. Una vez leí a un tal Otto Fenichel, que decía que dos personas se aman mucho no cuando se aman mucho una a otra sino cuando aman juntos muchas cosas. Porque el amor es como un proyecto, proyectar y proyectarse. Entonces, hacer el amor (vaya cosa bonita), es abonar ese proyecto que contiene miles de proyectos externos a uno . Lo que sucede es ue en la consecución de esos proyectos lass cosas externas nos influyen y modifican a cada uno de distinta manera, y entonces comenzamos a amar más o a desamar más cada uno esas cosas externas, y el amor se va desandando. Por eso el amopr no se muere de un día para otro, sino que muchas veces languidece por tiempo, y eso nos frustra más y retroalimenta ese proceso de desamor. Casi inevitable. Como casi inevitable para recrear, es buscar nuevos objetivos, y allí interviene algo que no es muy común: la inteligencia. En el sentido de "inteligir", que es comprender y superar. Lo dicho, muy, muiy dificil. ¡Pero que lindo que es,joder¡