En silencio, rueda por mi mejilla una lagrima furtiva escapada de mi corazón,
no estoy triste pero no entiendo por que brota sin avisar.
Me sorprende sentir una cruel angustia quemando mi pecho,
sí sé que estoy llena de amor, pero no noto que son mis lágrimas
que han caído ahí y eso provoca una urgente necesidad de escuchar tú voz,
no es tristeza, pero siento que si,
pero solo cerré los ojos sin percatarme y te sentí lejos mi amor,
pero ahora, mucho mas que nunca,
mi corazón está contigo y mi alma no deja de abrazar tu alma.

Te amo y también te extraño mi cielo...