A Lady diana Spencer la matamos todos. La matamos quienes como yo, consumíamos compulsivamente todas las noticias y chismes que corrían sobre ella: el desprecio de su marido, su soledad, su bulimia, sus novios, sus hijos, sus campañas humanitarias.
A Lady diana Spencer la matamos todos. La matamos quienes como yo, consumíamos compulsivamente todas las noticias y chismes que corrían sobre ella: el desprecio de su marido, su soledad, su bulimia, sus novios, sus hijos, sus campañas humanitarias.
Si cuando lleguen las lluvias me ves parada
escurriendo tristezas,no creas que estoy llorando
si ves brillando mi cara, es tan solo la lluvia que no para...