Un marido llega a casa y la mujer lo recibe con un bofetón. Él le pregunta:
- "¿Pero por qué me pegas?".
- "Es que acabo de ver en el bolsillo de tu pantalón un papel con el nombre de Olga". Respondió ella.
- "¡Aaaahhh...Olga es el nombre del caballo que suelo apostar!".
Al díia siguiente, el marido vuelve a casa y la mujer le vuelve a abofetear.
- "¡Bueno y por qué me pegas ahora!".
- "Es que te ha llamado tu caballo".
La música se toca con el corazón y se siente con el alma.
Quien ama la música, ama la vida.
Sin música, la vida sería un error.
La vida es como el teclado de un piano; tiene teclas blancas, pero también algunas negras.