La respuesta a ambas objeciones es simple, usted confunde a Jesús Dios y Hombre con un Dios que no es hombre. Jesús Hombre (encarnado) no sabía la hora ni la fecha del día final, Jesús Resucitado sí la sabe pero no les dice a los apóstoles:
Hechos 1 1
6 Los que estaban reunidos le preguntaron: «Señor, ¿es en este
momento cuando vas a restablecer el Reino de Israel?»
7 El les contestó: «A vosotros no os toca conocer el tiempo y el
momento que ha fijado el Padre con su autoridad,
8 sino que recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre
vosotros, y seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y
hasta los confines de la tierra.»
Es así evidente que Jesús sí sabe la fecha pero no nos corresponde saberla a nosotros.
Lo increible es que Cristo habiéndonos dicho que no nos correspondía saber dichas fechas, los masones Russellitas se pusieron a averiguar el día final con los cálculos de Charles T. Russell.
Eso pues hace a los Testigos de Jehova no otra cosa sino Russellitas.
Fechas en las que los Russellitas hicieron el Ridículo por seguir a un Falso Profeta:
Fechas en que los Russellitas fijaron en fin del mundo:
1874.
1914
1918
1925
1940
1975
1994
http://www.sindioses.org/examenrelig...testigos2.html
¿No se Cansan de hacer el ridículo?
¿o es que los diezmos y dádivas son irresistibles como para dejar de mentir?
Cristo Hombre tenía que obedecer porque de eso se trataba la redención, porque si Cristo no hubiese obedecido, no habríamos sido redimidos, La obediencia del verbo no era obediencia como Dios sino obediencia como hombre, Dios que no era hombre al hacerse hombre como nosotros tuvo que aprender lo que el hombre entre ello la obediencia.
Cristo conoce todo eso porque el Padre se lo revela, lo que usted no logra entender es que el Hijo no puede ser de naturaleza distinta del Padre, porque de serlo entonces no sería hijo. Me explico más amplia y folclóricamente: Por mucho que usted diga a sus perros que son sus hijos, sus perros no lo son. Por mucho que diga que sus plantas son sus hijas, no lo son. Y lo sabemos porque no son de su misma naturaleza.
La Naturaleza de Dios es DIVINA, no HUMANA, y Dios Manifiesta que Cristo es SU HIJO, y no miente en Ello. El HIJO es de la Misma Naturaleza del Padre. Todo lo que Puede el Padre lo Puede el Hijo.
Juan 5:19-47
19 Jesús, pues, tomando la palabra, les decía: «En verdad, en verdad
os digo: el Hijo no puede hacer nada por su cuenta, sino lo que ve hacer al
Padre: lo que hace él, eso también lo hace igualmente el Hijo.
20 Porque el Padre quiere al Hijo y le muestra todo lo que él hace. Y
le mostrará obras aún mayores que estas, para que os asombréis.
21 Porque, como el Padre resucita a los muertos y les da la vida, así
también el Hijo da la vida a los que quiere.
22 Porque el Padre no juzga a nadie; sino que todo juicio lo ha
entregado al Hijo,
23 para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no
honra al Hijo no honra al Padre que lo ha enviado.
24 En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en
el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha
pasado de la muerte a la vida.
25 En verdad, en verdad os digo: llega la hora (ya estamos en ella), en
que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan vivirán.
26 Porque, como el Padre tiene vida en sí mismo, así también le ha
dado al Hijo tener vida en sí mismo,
27 y le ha dado poder para juzgar, porque es Hijo del hombre.
28 No os extrañéis de esto: llega la hora en que todos los que estén en
los sepulcros oirán su voz
29 y saldrán los que hayan hecho el bien para una resurrección de
vida, y los que hayan hecho el mal, para una resurrección de juicio.
30 Y no puedo hacer nada por mi cuenta: juzgo según lo que oigo; y
mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que
me ha enviado.
31 «Si yo diera testimonio de mí mismo, mi testimonio no sería
válido.
32 Otro es el que da testimonio de mí, y yo sé que es válido el
testimonio que da de mí.
33 Vosotros mandasteis enviados donde Juan, y él dio testimonio de la
verdad.
34 No es que yo busque testimonio de un hombre, sino que digo esto
para que os salvéis.
35 El era la lámpara que arde y alumbra y vosotros quisisteis recrearos
una hora con su luz.
36 Pero yo tengo un testimonio mayor que el de Juan; porque las
obras que el Padre me ha encomendado llevar a cabo, las mismas obras que
realizo, dan testimonio de mí, de que el Padre me ha enviado.
37 Y el Padre, que me ha enviado, es el que ha dado testimonio de mí.
Vosotros no habéis oído nunca su voz, ni habéis visto nunca su rostro,
38 ni habita su palabra en vosotros, porque no creéis al que El ha
enviado.
39 «Vosotros investigáis las escrituras, ya que creéis tener en ellas
vida eterna; ellas son las que dan testimonio de mí;
40 y vosotros no queréis venir a mí para tener vida.
41 La gloria no la recibo de los hombres.
42 Pero yo os conozco: no tenéis en vosotros el amor de Dios.
43 Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viene
en su propio nombre, a ése le recibiréis.
44 ¿Cómo podéis creer vosotros, que aceptáis gloria unos de otros, y
no buscáis la gloria que viene del único Dios?
45 No penséis que os voy a acusar yo delante del Padre. Vuestro
acusador es Moisés, en quién habéis puesto vuestra esperanza.
46 Porque, si creyerais a Moisés, me creeríais a mí, porque él escribió
de mí.
47 Pero si no creéis en sus escritos, cómo vais a creer en mis
palabras?»