Buenas ELB,
En esos tiempos seguían a Jesucristo físicamente porque era necesario y como iban por todas las naciones no les eran necesarias herencias ni casas ya que era la forma que tenían de predicar el Evangelio de Dios por todas las naciones. Hoy en día puedes hacer lo que Dios manda sin riquezas ni posesiones, en casa, con un ordenador e internet puedes llegar al mundo entero para hacer lo que Dios manda que es predicar el Evangelio.
Gracias a Dios a día de hoy puedo decir que tengo lo necesario para vivir y las herramientas necesarias para hacer lo que Dios manda que es predicar el Evangelio.
Todos sabemos distinguir en que momento empieza a tener una persona riquezas que le sobran y que ya no es lo justo para vivir y predicar el Evangelio, pues eso que te sobra es lo que tienes que poner al servicio de Dios y los pobres.
Yo ya te he dicho que cumplo con lo que Dios manda, ahora te hago yo una pregunta. ¿Tu cumples lo que Dios manda o tienes riquezas que te sobran y que no son necesarias para predicar la palabra de Dios?