Si buscamos primero el reino
no tenemos que preocuparnos por lo que vamos a comer o vamos a ponernos en nuestros magníficos cuerpos
musculosos así como el mío
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Si buscamos primero el reino
no tenemos que preocuparnos por lo que vamos a comer o vamos a ponernos en nuestros magníficos cuerpos
musculosos así como el mío
18 Y yo te digo: «Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella. 19 Yo te dará las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo».
Por eso lo dices
y no porque Jesús nos mandó a perdonarnos unos a otros
Y que hay de que tanto amo Dios al mundo
que mando a su único hijo
a darse como sacrificio
por nuestros pecados
Hay muchas más razones fuertes
para perdonarnos
unos a otros.
empieza a hacerlo
y verás como se te quita
Esa soberbia
y ganas de pelear
y te entra La Paz de nuestro señor Jesucristo en tu
corazón
No se trata de nosotros
ni de una competencia
Jesús nos manda a seguir adquiriendo
conocimiento y eso es lo que hemos hecho
Tu en cambio no puedes responder ninguna pregunta que se te formule
Jehová quiere que sus siervos prediquemos en toda la Tierra,
y no permitirá que nada nos detenga. Por eso él nos ha estado ayudando a predicar.
¿Cómo? Nos ha separado de las religiones falsas.
Él hizo lo mismo en el pasado,
cuando liberó a los israelitas de Babilonia (Revelación 18:1-4).
Además, nos ha enseñado muchas cosas que nos benefician a cada uno de nosotros.
Por ejemplo, nos ha enseñado a predicar y a vivir en paz con los demás (leaIsaías 48:16-18).
Como vemos, Jehová nos ayuda para que podamos predicar.
¿Significa eso que él controla todo lo que pasa en el mundo para ayudarnos a predicar?
No, no significa eso. Es cierto que en el mundo han pasado algunas cosas
que nos han hecho más fácil la predicación.
Pero seguimos viviendo en el mundo de Satanás,
y por eso seguimos sufriendo persecuciones y otros problemas.
Lo que Jehová hace es ayudarnos a enfrentar esos problemas y seguir predicando (Isaías 41:13; 1 Juan 5:19).