Bueno, que le vamos a hacer que Dios existe, que no existe, que sì existe pero no atendiò a una peticiòn que le hice con mucha vemencia, con mucha urgencia. Claro lo que pensamos es que Dios tiene una secretaria que va anotando las peticiones que van llegando a su oficina, que la mia se debiò traspapelar y tendrè que rogar nuevamente ser atendido, bièn Dios querido, èsta vez no falles.