Es manifiesto : Pasan insultado y blasfemando la Fe. ahhh y ADREDE y llenos de cinismo.
En la iconografía en la que se mezclan Dioniso y Cristo, ya que “el primero constituía sin duda el equivalente más obvio del Hijo de Dios cristiano”. Es esta una muestra de la pervivencia del dionisismo hasta bien entrado el siglo V, idea que va contra la concepción de algunos optimistas que han pensado que el cristianismo en ese siglo había ya erradicado totalmente el paganismo. La iconografía demuestra que no es así, lo demuestran con toda evidencia. Lo que llama más la atención dentro de este proceso de fusión, sincretismo, entre Dioniso y Cristo es la gema que se hallaba en el Museo de Antigüedades (Antikensammlungen) de Berlín, que se perdió en la Segunda guerra mundial, pero del que quedan fotografías: el “Orfeo crucificado”, denominado gema del Orpheos bakkikós: ¡nada menos que un Dioniso crucificado como Jesús!. Se halla una síntesis de la cuestión de las semejanzas entre Dioniso – Cristo que merece ser citada: “Dioniso es una divinidad que viene a despertar a los mortales… una dios único, hijo del Padre, hecho palabra, carne y vid, un dios curador a través de su planta redentora, que promete felicidad a los seres humanos en su venida a este mundo y llevarlos a un más allá dichoso como a la propia Ariadna… Es ante todo un Dioniso influido por la gran divinidad que habrá de imponerse al fin a lo largo de todo el Mediterráneo: Cristo. Dicho de otra manera, sin esta influencia cruzada –pues el Dioniso tardo antiguo influirá a su vez en la imagen de Cristo– no es posible explicar esta nueva visión tardía del dios cruel de Las Bacantes de Eurípides (s. V a. C.), del desgarro ritual del cabritillo, y su definitiva transformación en un hijo del padre Zeus con una misión ante la humanidad, que llora las penas de esta, se compadece de los hombres y cura sus dolencias mediante su don milagroso”
Ariadna-María que se cruza en el proceso de asimilación entre Dioniso-Cristo: se trata de la conexión evidente entre la ascensión a los cielos de la joven princesa cretense como la Corona Borealis y la asunción o Dormición de María… que aparece en la literatura cristiana, no estrictamente dogmática (en realidad apócrifa) en los siglos IV y VI”.
Lo dicho copy paste de dioses ancestrales. ¡Nada nuevo!