Adán NO SABIA que desobedecer es malo.
Recuerda que recién después de comer el fruto lo supo.
Así que no vengas con inventos.
O Adán sabia qué es bueno o malo, en cuyo caso el cuento del fruto es una estupidez,
O Adán no lo sabía, en cuyo caso, se trata de un engaño hecho por Jehová.
Así que, con las historias infantiles contradictorias, mejor se las predicas a los bobos.
Los mitos, estimado, son mitos: no son historias reales.
Es tan irreal como la historia de la chuleta, o la de la culebra que conversa.
Finalmente, la otra estupidez es decir que Adán era perfecto.
Si hubiese sido perfecto, no habría comido ninguna mugre ofrecida por su chuleta.