Jehová el "único Dios verdadero"
Sin principio o fin de existencia
Sal. 90:2 “Aun desde tiempo indefinido hasta tiempo indefinido tú eres Dios.”
Sal. 93:2 “Tu trono está firmemente establecido desde mucho tiempo atrás; eres desde tiempo indefinido.”
Job 36:26 “¡He aquí! Dios es más sublime de lo que podemos saber; en número sus años son inescrutables.”
1 Tim. 1:17 “Ahora al Rey de la eternidad, incorruptible, invisible, el único Dios, sea honra y gloria para siempre jamás.”
Jer. 10:10 “Jehová es en verdad Dios. Él es el Dios vivo y el Rey hasta tiempo indefinido.”
Jehová el "único Dios verdadero"
Es imposible que ojos humanos lo vean
Juan 1:18 “A Dios ningún hombre lo ha visto jamás.”
Éxo. 33:20 “No*puedes ver mi rostro, porque ningún hombre puede verme y sin embargo vivir.”
1*Tim. 1:17 “Rey de la eternidad, incorruptible, invisible, el único Dios.”
Jehová el "único Dios verdadero"
Manifestó notablemente su existencia por medio de visiones y ángeles
Éxo. 24:10, 11 “Llegaron a ver al Dios de Israel. Y debajo de sus pies había lo que se parecía a una obra de losas de zafiro y a los mismos cielos por pureza... los hombres distinguidos de los hijos de Israel... consiguieron una visión del Dios verdadero.”
Dan. 7:7, 9, 13 “Seguí contemplando en las visiones de la noche... hasta que se colocaron tronos y el Anciano de días se sentó. Su ropa era blanca justamente como la nieve, y el cabello de su cabeza era como lana limpia. Su trono era llamas de fuego; sus ruedas eran un fuego ardiente. Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! con las nubes de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre; y al Anciano de días obtuvo acceso.”
Luc. 1:19 “En respuesta el ángel le dijo: ‘Yo soy Gabriel, que estoy de pie cerca y delante de Dios, fui enviado para hablar contigo.’”
Éxo. 19:16, 20; 20:1 “Al tercer día cuando vino a ser la mañana aconteció que empezaron a ocurrir truenos y relámpagos, y una nube densa sobre la montaña y un sonido muy fuerte de cuerno, de manera que empezó a temblar toda la gente que estaba en el campamento. De modo que Jehová descendió sobre el monte Sinaí a la cima de la montaña... Y procedió Dios a hablar todas estas palabras.” (Compare Hech. 7:53; Heb. 2:2.)