"Como el Padre que vive me envió, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí." (Juan 6:57)
Se refiere a Dios manifestado en carne. E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria. (1 Tim 3:16)