Había una vez una docena de tamales oaxaqueños, que vende doña Antonia, la viuda, Labiuda de apellido... Antonia de Labiuda, pero comunmente llamada: "Dama Tres Dedos". En fin, había bañado su olla grande para enjuagar su bebé con manzanilla de los países escandinavos, porque le dijeron en la carcel...