Si aquí tenes ROBERTO MISERICORDIA Y ELISABET
porque hay muchos lo que rechazan ....es la enseñanza del EVANGELIO..
DE QUE NOS SALVA SU SANGRE Y MAS NADA:biggrin:
Precisamente son los únicos que aquí en este foro, son personas serias e inteligentes...se les nota en la escritura y que defienden con fuerza el Evangelio...los anticristos en todo caso sois vosotros....los que no sólo no lo predicáis, sino que lo perseguís.
"Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado". (Marcos 16:15-16).
Esta enseñanza no la predican muchas falsas religiones...sobre todo las que agarran las armas..o matan a sus semejantes.
La Ley que se dio a Israel a través de Moisés
incluía entre sus disposiciones la institución
de un sacerdocio y las ofrendas de sacrificios de animales.
Como muestra el apóstol Pablo bajo inspiración,
aunque la Ley provenía de Dios, por lo que era perfecta,
ni la Ley ni el sacerdocio ni los sacrificios mismos
hicieron perfectos a los que se esforzaban por cumplirla.
(Heb 7:11,*19; 10:1.)
Pero, todas estas disposiciones divinas cumplieron
con el propósito designado por Dios:
la Ley sirvió de “tutor” para conducir a los hombres al Cristo,
fue una “sombra [perfecta] de las buenas cosas por venir”.
(Gál 3:19-25; Heb 10:1.)
Kimo
La Ley que se dio a Israel a través de Moisés
incluía entre sus disposiciones la institución
de un sacerdocio y las ofrendas de sacrificios de animales.
Para nada totalmente equivocado.... Jesucristo que es Dios... no quiere sacrificios ni holocaustos, pero si conocimiento de Dios a través de la enseñanza cristiana del Evangelio... que tú no conoces.
Por consiguiente, cuando Pablo habla de la
“incapacidad de parte de la Ley,
en tanto que era débil a causa de la carne” (Ro 8:3),
es obvio que se refiere
—como explica Hebreos 7:11, 18-28—
a la incapacidad del sumo sacerdote judío
(que era quien, según la Ley,
se encargaba de los sacrificios
y entraba en el Santísimo
el Día de Expiación con la sangre del sacrificio)
de “salvar completamente” a quienes servía.
Aunque el ofrecer sacrificios por medio
del sacerdocio aarónico permitió que el pueblo
tuviera una posición aprobada ante Dios,
esto no les libró por completo (es decir, a la perfección)
de la conciencia del pecado
Toma kimo
Si hubierais comprendido lo que quiere decir: "Misericordia quiero y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes". (Mateo 12,7).
Dios es misericordioso y Él no quería sacrificios para sus hijos, pero satanás, enemigo de Dios siempre quería hacer ver que Dios era cruel y que mandaba al pueblo llevar cargas insoportables. Pero esa carga de los sacrificios escritos en las leyes del viejo testamento no venía de Dios ni la quería Dios, sino que fueron los hombres los que impusieron esas leyes como si fueran leyes de Dios..., pues los escribas había cambiado la Ley de Dios, como nos dicen los profetas:
"...mi pueblo no conoce el juicio de Yavé. ¿Cómo decís: Nosotros somos sabios, y la ley de Yavé está con nosotros? Ciertamente la ha cambiado en mentira la pluma mentirosa de los escribas" (Jeremías 8:7-9).
Los cristianos aceptan la muerte y
creen que Dios resucito a Jesus de la muerte.
Con el fin de prepararlos para lo que viene,
Jesús lleva a sus apóstoles aparte y les dice:
“Estamos subiendo a Jerusalén,
y allí el Hijo del Hombre va a ser entregado
a los sacerdotes principales y a los escribas.
Locondenarán a muerte
y lo entregarán a hombres de las naciones,
que se burlarán de él,
le darán latigazos y lo ejecutarán en un madero;
y al tercer día será resucitado” (Mateo 20:18,19).
Olvidas que Jesucristo mismo puso su vida y la volvió a tomar. Jesucristo es Dios mismo que se hizo hombre, y cuando predicó el Evangelio nos enseñó los mandamientos que había dado Él mismo desde siempre y para siempre:
Mateo 19
Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos.
19:18 Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio.
19:19 Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
19:20 El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta?
19:21 Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.
19:22 Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.
9:23 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos.
19:24 Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios.
De todos los regalos que Dios nos ha hecho,
hay uno que necesitamos más que ningún otro.
Es el mayor regalo de Dios.
Nos lo dio cuando envió a su Hijo como rescate.
Gracias a este rescate podremos vivir para siempre
(lea Mateo 20:28).
Al enviar a Jesús a la Tierra,
Jehová demostró que nos ama de verdad