Escribes en letra tan grande que parece que quieras ser más que los demás, por lo que no te suelo leer... continúo así... me cuesta leerte.
Si pudieras no maximizar tanto la letra parecería que quieres ser más humilde.
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Si lo que dices es tan grande y realmente está respaldado por Dios, ¿para qué necesita tanto artificio? pareciera una maniobra de complejo de inferioridad, pero, no digo que lo sea. Sería preferible que no meta tanta artificio si igual sus argumentos estarán bajo la misma intensidad.
¿No es lo más prudente miserycordia?
Todo aquello de hacer daño a las personas lo abolió el Señor... Así que no se debe llamar mandamientos de Dios a todos los preceptos escritos en las biblias impuestas por los poderosos de Roma y que Jesucristo abolio...
Los misericordiosos mandamientos de Jesucristo, muy pocos los quieren guardar con amor, porque mandan NO MATARÁS y tener misericordia con todos... ""porque esto es mi sangre que sella el nuevo pacto"... ¿Y cual es el nuevo pacto?... El nuevo pacto son los misericordiosos mandamientos del Evangelio de Jesucristo que hay que guardar para entrar en la vida, pues Jesucristo así te dice:
""Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos""...
Los mandamientos del nuevo pacto:
"Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo. " (Mateo 19:16-24)
Los que aman a sus prójimos como así mismo, tienen en común con ellos todo lo que tienen para que tengan lo que necesitan...
misericordia¿Pero usted en todos los hilos va a poner lo mismo?....
La sangre de Jesús es la sangre del Nuevo Pacto porque Jesús dio su vida para enseñar los mandamientos del Nuevo Pacto, que son los mandamientos que Jesús nos enseñó cuando predicó el Evangelio, que dejaron anulados los mandatos del Antiguo Testamento que solo eran mandatos de hombres, mandatos que ordenaban a los hombres esclavitud, sacrificios, penas de muerte, guerras y masacres de pueblos enteros.
Los mandamientos que Jesús nos enseña en el Evangelio son los que realmente había dado Dios desde siempre y para siempre, por eso Jesús era la Luz que luce en las tinieblas y que daba vista a los ciegos que estaban confundidos con muchos mandatos de muerte del Antiguo Testamento. Pero los mandamientos que Jesús enseñó no los aceptaron los fariseos, pues ellos tenían como si fueran mandamientos de Dios todos los mandatos del Antiguo Testamento que Jesús había anulado con sus enseñanzas del Evangelio. Por eso Jesús dijo:
Juan 9:39
Dijo Jesús: Para juicio he venido yo a este mundo; para que los que no ven, vean, y los que ven, sean cegados.
9:40 Entonces algunos de los fariseos que estaban con él, al oír esto, le dijeron: ¿Acaso nosotros somos también ciegos?
9:41 Jesús les respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora, porque decís: Vemos, vuestro pecado permanece.
Entonces, el pecado es no aceptar los mandamientos de Jesús y seguir teniendo como si fueran mandamientos de Dios los mandatos del Antiguo Testamento que Jesús anuló.
Kimo.... Para que no nis lo digas mas...
Ya Te ha contestado misericordia.... Más las veces que te lo he puesto yo. La sangre es el nuevo pacto.
Y eso es lo que debes enseñar.
Debemos enseñar
Este mandato también
La fe del cristiano esta basada
en el rescate de Jesus
Mateo 26:28
Nueva Biblia Viva
porque esto es mi sangre que sella el nuevo pacto.
Mi sangre se derramará para perdonar con ella
los pecados de infinidad de personas.
Lucas 22:19 Reina-Valera Antigua
19 Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió,
y les dió, diciendo:
Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado:
haced esto en memoria de mí.
Pablo indicó que todos los cristianos
debían celebrar la Cena del Señor, no solo los apóstoles.
A los creyentes de Corinto les escribió:
“Yo recibí del Señor lo que también les transmití,
que el Señor Jesús tomó un pan y,
después de dar gracias, lo partió y dijo:
‘Esto significa mi cuerpo a favor de ustedes.
Sigan haciendo esto en memoria de mí’” (1 Cor. 11:23, 24).
(Mateo 20:28)
Eso fue lo que hizo el Hijo del Hombre.
Él no vino para que le sirvieran,
sino para servir a los demás
y para dar su vida
como rescate
a cambio de muchas personas”.
(Marcos 14:24)
Y les dijo: “Esto representa mi sangre,
‘la sangre del pacto’, que va a ser derramada
en beneficio de muchas personas.