Y TU NOS EXPLICAS MAS
AQUI:
Roberto0;1695236114 escribió:
Por que Dios no queria esos sacrificios que mandaba la ley
por eso le preparo un cuerpo y quito lo primero'y establecio lo segundo
estudis
y ora por entendimiento
Nada de eso que dices contradice lo que Jesucristo manda, pues Jesucristo te dice que Dios no manda sacrificios, y desde esta base tienes que edificar tu doctrina, porque si sigues imponiendo sacrificios, seguirás desobedeciendo lo que Jesucristo te manda, porque Dios no quiere sacrificios:
"Si hubierais comprendido qué quiere decir: "Misericordia quiero, y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7) ...
Cuando Jesucristo te dice que dios no quiere sacrificios te lo dice en general, de todos los sacrificios, Jesucristo no especifico sacrificios de alabanza ni sacrificios de penas de muerte, ni sacrificios humanos, el hablo en general de los sacrificios, y El te dice que no quiere sacrificios y punto. Pues Jesucristo dice:
"Si hubierais comprendido qué quiere decir: "Misericordia quiero, y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7)
Roberto0;1695236114 escribió:
Por que Dios no queria esos sacrificios que mandaba la ley
por eso le preparo un cuerpo y quito lo primero'y establecio lo segundo
estudiay ora por entendimiento
___________________________________
ESTO SE LO MOSTRÉ A ROBERTO
Y LO ACEPTO
LE MOSTRÉ UN TEXTO BÍBLICO QUE ES MUY ENTENDIBLE Y CLARITO
Hebreos 10:8-10
Palabra de Dios para Todos
8Cristo comienza diciendo:
«No te agradan los sacrificios ni las ofrendas.
Tampoco te gustan los sacrificios de animales muertos y quemados,
ni los sacrificios que se ofrecen por los pecados»,
aunque todos estos sacrificios los ordena la ley.
9Luego añade: «Aquí estoy, Dios. En el libro de la ley está escrito acerca de mí:
Vine a hacer lo que tú quieres que haga».
Dios reemplaza el primer sistema de sacrificios por el sacrificio de Cristo.
10 Por eso el sacrificio del cuerpo de Cristo nos hace santos.
Él cumplió con lo que quería Dios cuando se entregó por nosotros una sola vez y para siempre.
ROBERTO ENTIENDE BIEN SACRIFICIOS NO QUIERO
Y LO CITA FUERA DE CONTEXTO
PARA NEGAR LO QUE TODOS LOS QUE HAN ACEPTADO
A JESÚS COMO NUESTRO SALVADOR APRENDIMOS DE EL
JESÚS ES UN SACRIFICIO POR NUESTROS PECADOS
PERO ROBERTO
Y SUS SEGUIDORES
NIEGAN A CRISTO
Tu siempre estás con los puntos difíciles y torcidos de las cartas atribuidas a Pablo, Pero no te atienes al Evangelio, que DIOS NO QUIERE SACRIFICIOS. ASÍ QUE debes ser fiel a lo que te manda el Evangelio, pues ese punto de las cartas que queréis hacer ver que Jesucristo se ofreció en sacrificio, es muy discutible y además no coincide con lo que manda el Evangelio. Y hay que ser fieles a lo que manda el Evangelio, y para que no te olvides te lo vuelvo a repetir.
El Evangelio así te dice:
"Si hubierais comprendido qué quiere decir: "Misericordia quiero, y no sacrificios", no condenaríais a los inocentes" (Mateo 12:7)
Evangelio, solo hay uno:
el Evangelio de Jesucristo.
Y Jesucristo no mandó predicar leyes del Viejo Testamento judío ni puntos difíciles y torcidos de las cartas atribuidas a Pablo.
Jesucristo mandó predicar solamente el Evangelio por todos los pueblos.
Eso de que en las cartas atribuidas a Pablo hay puntos difíciles que los indoctos tuercen, no es sólo para misericordia, sino para todo el que exaina bien las cartas, y para el mismo apóstol Pedro, que fue el que nos avisó de estas cosas:
2 Pedro 3:15
Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito,
3:16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición.
3:17 Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza.
3:18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.