Ya te dije hace algún tiempo...
Los cristianos solo nos dedicamos a extender el evangelio y a predicarlo.
Tú eres el que juzgas a los cristianos y persigues a los cristianos y persigues a Jesucristo es Dios.
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Parece que no tienes ninguna consciencia de cómo apuntas con el dedo a Kimo, y a todos los foristas.
Ahora mismo dices que eres "perseguido" o que " yo persigo a los cristianos", haciendo un juicio acerca del comportamiento de quienes te rodean.
Eso es juzgar. Pero claro, tú te permites apuntar con el dedo, y al mismo tiempo afirmar "mi casa no la vendo, porque es para mi hijo".
Qué hipocresía.
Los primeros cristianos tenían todas las cosas en común y no llamaban propia cosa alguna. Y Jesucristo dijo que uno era nuestro Padre y que todos nosotros somos hermanos. Por eso los apóstoles y primeros cristianos vivían como solo corazón y una sola alma teniendo todas las cosas en común.
Todos tenian sus casas
Las reuniones se daban en casas
no en un lugar comun
(1 Corintios 16:19) Las congregaciones de Asia les envían sus saludos.
Áquila y Prisca, junto con la congregación que está en su casa, l
os saludan afectuosamente en el Señor.
(Romanos 16:5) Saluden también a la congregación que está en su casa.
Saluden a mi amado Epéneto, que es de las primicias de Asia para Cristo.
(Filemón 2) así como a nuestra hermana Apfia y a nuestro compañero de armas Arquipo,
y a la congregación que está en tu casa:
NO ES VERDAD PORQUE JESÚS Tenía UNA CAJA PARA LOS POBRES
Y LAS CONGREGACIONES AYUDABAN A OTRAS QUE CAEN EN LA POBREZA
Y HABÍA UN ARREGLO, PARA DAR A LOS POBRES Y A LAS VIUDAS
DE MÁS DE 70 AÑOS QUE NO TUVIERAN HIJOS
SI NO, LA RESPONSABILIDAD ERA DEL HIJO
TENEMOS MISERICORDIA Y NO QUEREMOS SER CARGA PARA LOS DEMÁS
(Mateo 8:14) Al entrar en la casa de Pedro,
Jesús vio que la suegra de este estaba en cama con fiebre.
VIVÍAN EN CASAS
(Marcos 1:29) Luego salieron de la sinagoga y, junto con Santiago y Juan,
fueron a la casa de Simón y Andrés.
(Hechos 10:17) habían preguntado dónde quedaba
la casa de Simón y ya estaban allí en la puerta.
(Hechos 10:32) Por eso, envía a alguien a Jope y manda llamar a Simón,
conocido como Pedro.
Él está hospedado en la casa de Simón,
un curtidor que vive junto al mar’.
La bestia salvaje tiene nombre, y este nombre es un número: 666. El seis, como número, se relaciona con los enemigos de Jehová.
Un filisteo de los refaím era de “tamaño extraordinario”, y sus dedos de las manos y de los pies estaban en cantidades de seis. (1 Crónicas 20:6.)
El rey Nabucodonosor erigió una estatua de oro de 6 codos de ancho y 60 codos de alto, para unificar a sus funcionarios políticos en una sola adoración. Cuando los siervos de Dios rehusaron adorar la imagen de oro, el rey hizo que fueran arrojados en un horno ardiente. (Daniel 3:1-23.) El número seis no llega a siete, (el 7 que representa lo completo desde el punto de vista de Dios). Por lo tanto, el seis representa, apropiadamente, imperfeccion.
Por eso, ¿cómo identifica este número a la bestia? Juan dice que es número de hombre, no de una persona celestial, de modo que el nombre ayuda a confirmar que la bestia salvaje es terrestre, símbolo de gobernación humana.
Tal como el seis no llega a la altura del siete, así 666 —tres veces 6— es un nombre apropiado pero gigantesco sistema político del mundo que tan miserablemente fracasa en cuanto a satisfacer la norma de perfección de Dios.
La bestia salvaje política del mundo rige con supremacía bajo el nombre-número 666, mientras que la política en grande, la religión en grande y los negocios en grande mantienen en funcionamiento a esa bestia salvaje como opresora de la humanidad y perseguidora del pueblo de Dios.