Sabes bien que las cartas dicen que los siervos o esclavos obedezcan en todo a sus amos. De ese modo, justifican la esclavitud
Y también dicen las cartas que se obedezca en todo a los gobernantes sin hacer distinción entre buenos y malos, y continúan diciendo que no en vano llevan la espada. De ese modo, las cartas justifican la espada de los poderosos.
Así que las cartas atribuidas a Pablo en esos puntos predican un evangelio diferente al de Jesucristo, y Pablo nos advirtió para que no creyéramos evangelios diferentes al de Jesucristo ni aunque los viniera predicando el mismo Pablo:
Gálatas 1:6
Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.
1:7 No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo.
1:8 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.
1:9 Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema